LA PAZ, 21 Abr. (EP/AP) -
El presidente Evo Morales se reafirmó ayer viernes en su posición de "luchador antiimperialista" junto al líder cubano Fidel Castro y al venezolano Hugo Chávez, al tiempo que atacó al Gobierno de Estados Unidos por "proteger al terrorista Luis Posada Carriles".
"Quienes creemos en la liberación de los pueblos, en la dignidad y soberanía, nunca podemos dejar de ser antiimperialistas", dijo, y aseguró que la mejor forma de "pagar la cooperación" que otorga el Gobierno de La Habana al boliviano es "profundizando la lucha antiimperialista en América".
Morales contó anécdotas suyas junto a Castro y abundó en elogios al convaleciente mandatario cubano durante la presentación, en el Palacio de Gobierno, del libro "Cien horas con Fidel", del periodista francés Ignacio Ramonet el viernes en la noche.
Dijo no entender por qué el Gobierno estadounidense "habla de lucha contra el terrorismo y protege a terroristas y delincuentes" como Posada Carriles, que tras pasar casi dos años detenido, salió el jueves de una cárcel de Nuevo México después de pagar él y su familia una fianza de 350.000 dólares.
El anticastrista está acusado por Cuba, Venezuela y Nicaragua de perpetrar atentados terroristas contra el Gobierno de La Habana.
Morales dijo que para él, "Fidel sigue siendo el primer comandante de las fuerzas libertarias de América". "El país más agredido por el imperio es el más solidario con el pueblo boliviano", sostuvo el gobernante, al mencionar las 80.000 operaciones de ojos que realizaron hasta ahora gratuitamente médicos cubanos desde que el mandatario indígena asumió el Gobierno de Bolivia en enero del 2006.
"Fidel ya no es un sabio, es un símbolo de dignidad y de la liberación de todos los pueblos del mundo. No he visto a ningún político en el mundo más preocupado por salvar a la humanidad", señaló ante ministros, diplomáticos, jefes militares y líderes sindicales que asistieron a la ceremonia.