LA PAZ, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha designado a Wilfredo Chávez y Rubén Saavedra como ministros de Gobierno y Defensa, respectivamente, después de que sus antecesores en el cargo presentaran su dimisión en el marco de las protestas por la construcción de una carretera en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS).
Morales ha tomado juramento a ambos ministros en una ceremonia celebrada en el palacio de Quemado, sede gubernamental. "Ambos tenemos la convicción de que es un privilegio servir a este proceso de cambio del pueblo boliviano", ha dicho Saavedra, en nombre también de su colega.
Hasta su nombramiento, Saavedra ejercía como director de Reivindicación Marítima y Chávez como viceministro de Coordinación Gubernamental, según indica la Agencia Boliviana de Información (ABI).
Saavedra sustituirá en el cargo a Sacha Llorenti, quien ha dimitido hace unas horas "para impedir que la derecha dañe el proceso de transformación" impulsado por Morales y Chávez sustituirá a María Cecilia Chacón, quien dimitió ayer en un gesto de condena a la violenta represión de las manifestaciones indígenas.
Estos cambios en el Gobierno se producen a raíz de la polémica suscitada por la violenta represión policial de una marcha indígena celebrada el domingo en el municipio de Yucumo para protestar contra la construcción del segundo tramo de la carretera que unirá los departamentos de Beni (norte) y Cochabamba (centro).
Estos disturbios se enmarcan en la marcha de protesta que unos 1.500 indígenas del TIPNIS iniciaron el pasado 15 de agosto contra la construcción de esta carretera, advirtiendo de un eventual expolio de los recursos naturales de este territorio.
La presión ejercida por las comunidades indígenas tras los enfrentamientos del domingo ha obligado a Morales a suspender el proyecto --que estaba en manos de una empresa brasileña-- y a crear una Comisión de Alto Nivel --integrada por expertos nacionales e internacionales-- para investigar lo ocurrido.
Morales, un indígena que llegó al poder en 2006 prometiendo defender los derechos de los más pobres, ha tenido que enfrentarse a las críticas de los indígenas, que le acusan de realizar importantes concesiones a empresas extranjeras, en supuesto detrimento de las comunidades en las que nació y se formó como dirigente cocalero.