LA PAZ, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los prefectos bolivianos de los departamentos de Santa Cruz, Beni, Tarija y Chuquisaca decidieron ayer acudir el próximo domingo a la reunión con el presidente, Evo Morales, en la ciudad de Cochabamba para definir la continuidad o no del diálogo.
El prefecto tarijeño, Mario Cossío, anunció la decisión tomada tras una reunión con los observadores internacionales del diálogo, en el hotel Portales de esta capital. "Vamos a concurrir el domingo a la reunión con el presidente (Evo Morales) para discutir el futuro del diálogo", comentó Cossío, en calidad de portavoz de los prefectos opositores, durante una conferencia de prensa.
Cossío indicó asimismo que esta será una muestra más de la "voluntad" de los prefectos para que el diálogo continúe y que en el encuentro se definirá si las conversaciones "tienen futuro o no". El presidente Evo Morales sentenció ayer, jueves, que el próximo domingo será definitivo en el diálogo, donde expresó su interés en que se suscriban los primeros acuerdos en base a los resultados obtenidos de las mesas técnicas.
Sin embargo, Cossío ratificó hoy que los equipos técnicos de las prefecturas, como lo decidieron el pasado 1 de septiembre en "protesta" por la detención del cívico José Vaca, acusado de terrorismo, no acudirán a las tratativas de las mesas técnicas hasta después de los resultados de la reunión del próximo domingo.
EL GOBIERNO "NO CUMPLIÓ"
Según el prefecto tarijeño, esta decisión la asumieron porque supuestamente el Gobierno "no cumplió" con el acuerdo suscrito el pasado 16 de septiembre que posibilitó la reanudación del diálogo, el que ahora incluso estará en riesgo. Además acusó al Ejecutivo de no haber suspendido las propagandas de "desprestigio" en contra de los prefectos y las acciones penales, que las calificó de "políticas", en contra de las personas que habrían atentado contra los bienes del Estado.
El gobernador citó el caso del ex prefecto de Pando, Leopoldo Fernández y del cívico tarijeño José Vaca, ambos recluidos en el penal de San Pedro, de quienes aseguró que se violaron sus derechos fundamentales. El primero está acusado de asesinato y el segundo de terrorismo.
En ese marco, señaló que la carta del Gobierno firmada por el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, donde desmiente que se haya instaurado una persecución política en contra de los cívicos, "no colmó la expectativas de los prefectos", pues dijo que se estaría tratando de encubrir todos los actos antes mencionados.
LOS CRIMENES NO SE NEGOCIAN
Horas antes a la decisión de los prefectos, el viceministro de Descentralización, Fabián Yaksic, a nombre del Gobierno, dejó claro que los atentados y los crímenes no serán parte de las negociaciones. Además, comentó que la detención del cívico tarijeño, emitido mediante mandamiento del Ministerio Público, fue o sólo un pretexto que los que utilizaron para retirarse de las mesas técnicas del diálogo.
Por tanto, afirmó que el diálogo en su primera fase cerrará el próximo domingo, "estén o no los prefectos opositores". Adelantó que ese día, de acuerdo con lo convenido, se entregarán los informes de las labores realizadas por las comisiones técnicas referidas a las autonomías y la nueva Constitución Política del Estado, y el tema del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).
Por su parte, los facilitadores locales y de la Unión Sudamericana de Naciones, de Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos confirmaron su presencia para la reunión del próximo domingo en la ciudad de Cochabamba.