Actualizado 28/12/2006 00:26

Brasil.- Lula da Silva promete "cosas nuevas" como reformas en el sistema de previsión social en su segundo mandato

BRASILIA, 27 Dic. (EP/AP) -

El presidente Luis Ignacio Lula da Silva dijo hoy que en su segundo mandato habrá "cosas nuevas". Lula hizo estas declaraciones tras la firma de un nuevo acuerdo para el ascenso del salario mínimo. Entre las novedades está la discusión de reformas clave del sistema de previsión social.

Lula dijo hoy que esas reformas no serán discutidas sólo por "media docena de técnicos" sino por toda la sociedad, desde congresistas hasta líderes obreros.

"Es necesario que tengamos coraje para hacer las cosas que aún no hicimos; les voy a decir una cosa, vamos a tener que discutir reformas", dijo Lula en el acto en el palacio de Gobierno frente a dirigentes sindicales y ministros de su gabinete.

"Sueño en construir la reforma con ustedes", agregó el mandatario en su discurso divulgado por la oficina de prensa de Gobierno.

El presidente indicó que fue reelegido, en los pasados comicios de octubre, "para cuatro años más y no quiero hacer la mismas cosas que ya hice en los primeros cuatro años. Ya hice y está hecho. Ahora tenemos que hacer cosas nuevas", señaló.

"Hacer cosas diferentes es el desafío que tenemos", añadió el mandatario, sin ofrecer detalles de lo que desea hacer.

Lula da Silva postergó hasta enero la presentación de un conjunto de medidas económicas, argumentando que tenía que ser "perfeccionada".

Lula, quien asume su nuevo mandato de cuatro años el 1 de enero, dijo que tanto sindicalistas, como parlamentarios y Gobierno debían "meterse en la cabeza que no estamos aquí apenas para gobernar", recalcó.

"Estamos aquí para cuidar de este país. Y cuidar de este país significa que tratemos al pueblo como la madre trata a los hijos, cuida de los que más lo necesitan", declaró el presidente.

Contra la recomendación de sus técnicos del Ministerio de Hacienda, Lula da Silva pactó el 21 de diciembre con los sindicatos un ajuste que eleva 8,5 por ciento ó de 350 reales a 380 reales (123,43 euros a 134,01 euros) el salario mínimo mensual a partir del 2007.

Como en Brasil los beneficios que reciben 15,8 millones de jubilados están vinculados al aumento del salario mínimo, el ministerio de Hacienda había propuesto un ajuste menor, de 367 reales (129,52 euros), porque así podía reducir el impacto sobre el ya abultado déficit en el sistema de previsión social, según había dicho el ministro de Hacienda, Guido Mantega.

La negociación del salario mínimo --que devengan unos 26,5 millones de personas en Brasil, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE)-- es clave para las cuentas oficiales porque está vinculado a los beneficios que reciben los jubilados.

El ajuste salarial podría representar unos 4.500 millones de reales (unos 1.524 millones de euros) adicionales al ya abultado déficit del sistema de previsión social y --sin tener en cuenta el último ajuste, que sólo rige en 2007-- cerraría este año en unos 42.400 millones de reales (unos 15.085 millones de euros).