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BRASILIA, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha urgido a sus ministros a entregar antes de que acabe este año las obras de calado social, con el fin de favorecer su reelección en los comicios de 2014, según ha informado la prensa local.
Rousseff se ha reunido este sábado durante siete horas con su Gabinete en el Palacio de Alvorada (residencia presidencial brasileña) para abordar el cronograma de las obras en las áreas de salud y educación y de las infraestructuras.
Interrogada a la salida del encuentro, la jefa de Gabinete, Gleise Hoffmann, ha negado que el objetivo fuera la campaña electoral de Rousseff, sino avanzar en el cumplimiento de los compromisos gubernamentales.
"Esto tiene que ver con los resultados del Gobierno. Un Gobierno electo asume compromisos con la ciudadanía a partir de su programa y después tiene que rendir cuentas", ha explicado, en declaraciones recogidas por el diario 'Folha de Sao Paulo'.
En concreto, la portavoz gubernamental ha revelado que "se ha hablado de varias entregas que la presidenta Rousseff ha exigido a sus ministros para que acelerasen algunos resultados y podamos rendir cuentas a la ciudadanía".
Al parecer, la líder del Partido de los Trabajadores (PT) ha pedido a sus ministros que elaboren un informe con el estado de las obras e infraestructuras que corresponden a cada uno de ellos y un plazo aproximado de entrega.
Hoffmann ha adelantado que "habrá una segunda fase de reuniones porque ha habido ministros que no han participado en esta", en concreto, los de Agricultura, Deportes y Grandes Eventos, que en estos últimos casos tienen una gran importancia por la cercanía del Mundial de Fútbol.
En la misma línea, el ministro de Comunicaciones, Paulo Bernardo, ha aclarado que no ha sido una "reunión de emergencia". "Sino un proceso normal de control para que las acciones gubernamentales sean más rápidas. La presidenta quiere que las cosas salgan bien", ha indicado.
Según los sondeos sobre intención de voto, Rousseff es la favorita de cara a los comicios del próximo año, algo que ha favorecido la salida del líder del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) José Serra de la carrera presidencial.
Uno de los principales desafíos de Rousseff es la unión de la líder ecologista Marina Silva y del líder del Partido Socialista Brasileño (PSB) Eduardo Campos, ambos antiguos aliados del Gobierno, para llegar al Palacio de Alvorada.