RÍO DE JANEIRO, 3 Sep. (Reuters/EP) -
El candidato del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB), José Serra, ha acusado a su contrincante en las elecciones presidenciales de octubre, la aspirante del Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, de acceder a información confidencial de las cuentas bancarias de cuatro miembros de la formación opositora, incluida la hija del ex gobernador del estado de Sao Paulo.
El escándalo saltó a la prensa brasileña este jueves aunque los datos bancarios de los dirigentes del PSDB, incluidos el vicepresidente del partido y la hija de Serra, fueron facilitados en septiembre de 2009. De momento, se desconoce la identidad de las personas que accedieron a esta información aunque, según el candidato, obedecían órdenes de Rousseff.
Así, la oposición ha considerado este hecho como un evidente intento de boicotear la campaña electoral de Serra con información privilegiada y confidencial. "Este es un proceso vil, criminal y comprometedor por fuerzas políticas que trabajan en nuestra contra. Estas fuerzas políticas están involucradas con Dilma Rousseff", dijo el presidente del PSDB y jefe de la campaña del candidato, Sergio Guerra.
Por su parte, la ex jefa de gabinete del presidente Luiz Inácio Lula da Silva consideró que estas afirmaciones son "frívolas" y "sin fundamento", ya que las supuestas consultas fueron realizadas antes de que anunciase su intención de presentarse como candidata a las próximas elecciones presidenciales.
En este contexto, el ministro de Finanzas, Guido Mantega, indicó que, a pesar del escándalo que ha causado gran conmoción entre los brasileños, no entra en sus planes despedir a las autoridades impositivas del país aunque sí se abrirá una investigación para esclarecer los hechos, que podrían vulneran el secreto bancario.
HORIZONTE ELECTORAL
Según analistas consultados por Reuters, "es improbable" que este escándalo afecte a Rousseff en la pugna electoral que en estos momentos encabeza con más de 20 puntos de ventaja sobre Serra, lo que le permitiría alzarse con la victoria en la primera ronda de estos comicios, prevista para el 3 de octubre.
"Es improbable que las acusaciones dañen a Rousseff, al menos por ahora, porque no existen pruebas concretas que vinculen los actos ilegales directamente con su campaña, tendría que haber un nuevo hallazgo que tocara a alguien importante de su equipo", dijo el analista político Rafael Cortez, de la consultoría Tendencias, en Sao Paulo.
Mientras, Lula ha aconsejado a Rousseff que se distancie de las acusaciones lo máximo posible para evitar que sea Serra el que marque la agenda de campaña en las últimas semanas de batalla política, según informó esta semana el diario 'O Estado de Sao Paulo', cintando fuentes de la Presidencia.