Actualizado 16/04/2015 07:29

Sindicatos protestan en Brasil contra la externalización del trabajo

Manifestación de la MTST y los trabajadores del metro en Sao Paulo.
Foto: STRINGER BRAZIL / REUTERS

  RÍO DE JANEIRO, 16 Abr. (Notimérica) -

   Las protestas de los sindicatos que este miércoles han salido a las calles de Brasil contra el proyecto de ley de externalización (PL 4330) han tenido lugar en, al menos, 38 ciudades de 23 estados, y aunque en general la adhesión no ha sido muy alta sí que han provocado importantes problemas en el tráfico de algunas ciudades.

   Las más afectadas han sido Salvador y Porto Alegre. En la capital de Bahía a primera hora de la mañana prácticamente ningún conductor de autobús ha ido a trabajar, lo que ha dejado 2.400 vehículos parados y 1,3 millones de personas sin transporte publico, según los sindicatos.

   En Porto Alegre, por su parte, no han funcionado los trenes que unen la ciudad con su área metropolitana y algunos autobuses municipales no han podido salir de las cocheras a causa de la acción de los piquetes.

   En Sao Paulo las protestas se han concentrado en las zonas industriales: se han realizado acciones frente a las fábricas de Honda, Toyota y Mercedes-Benz, y por la tarde ha tenido lugar una concentración en el centro, según informa el diario 'Folha de Sao Paulo'.

   Por un lado, integrantes de la Uniao Geral dos Trabalhadores han cortado un carril de la Avenida Paulista junto al edificio de la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (Fiesp), mientras que otra protesta más festiva ha tenido lugar frente al Masp, con varios trabajadores disfrazados de Ronald McDonals para denunciar la precariedad a la que aboca el proyecto de ley.

   Aunque en general la jornada ha transcurrido sin incidentes importantes, en Vitória, la capital de Espírito Santo, se han vivido momentos de tensión, cuando alrededor de 50 agentes de la Policía Militar han usado spray de pimienta y bombas de gas para dispersar a los manifestantes.

   Las centrales sindicales que han convocado la huelga aseguran que si se aprueba el proyecto de externalización del trabajo un empleado contratado por una empresa podrá ser despedido para que un tercero sea contratado, "con disminución de salarios, de derechos y un aumento de la jornada de trabajo".

   El presidente de la Central Única de Trabajadores (CUT), Vagner Freitas, ha asegurado que el proyecto no trae ningún beneficio ni a la los trabajadores ni a la economía brasileña, sino que garantiza "tranquilidad jurídica y muchos más lucros para los empresarios".

PROYECTO

     El proyecto de ley del diputado Sandro Mabel (Partido Liberal, PL) propone que las empresas que contraten mano de obra de terceros mantengan la responsabilidad de pagar las cargas laborales y de seguridad social.

   Según el proyecto, acabaría la separación entre la actividad-medio y la actividad-fin, autorizando la externalización no restringida.

      La presidenta de Brasil Dilma Rousseff, ha dicho que la posición del Gobierno se basa en que "la externalización no puede comprometer derechos de los trabajadores". Nosotros no podemos desorganizar el mundo del trabajo (con esta ley)", dijo hace unos días la presidenta.