Actualizado 17/03/2016 22:55

Miles de personas protestan contra el Gobierno en las principales ciudades de Brasil

Manifestaciones contra el Gobierno en Brasil
PAULO WHITAKER / REUTERS


BRASILIA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

Miles de personas se han manifestado este jueves en las principales ciudades de Brasil contra el Gobierno de Dilma Rousseff y la designación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva como jefe de la Casa Civil para blindarle frente a las investigaciones judiciales en su contra.

Las mayores movilizaciones han tenido lugar en Brasilia, donde se han producido manifestaciones a favor y en contra del Gobierno. "Ya ha tomado posesión", han gritado unos. "Lula, ministro de nada", han coreado los otros.

Los detractores de Rousseff se han enfrentado a la Policía Militar cuando les ha cortado el paso al Palacio de Planalto. Los manifestantes les han tirado diversos objetos y los agentes han respondido con gas lacrimógeno.

Sin embargo, los disturbios se han sucedido a lo largo de toda la jornada en distintos puntos de la capital brasileña. De acuerdo con el balance policial, una persona ha sido detenida por desobediencia y resistencia a la autoridad y varias han resultado heridas.

Sao Paulo, como es habitual, se ha convertido en el escenario de una gran concentración contra el Gobierno. "Lula, ladrón, tu lugar es la prisión" y "el pueblo unido jamás será vencido" han sido algunos de los lemas. "Yo viví una dictadura militar, sé muy bien lo que es eso, y quiero democracia, libertad y justicia", ha dicho una mujer de 70 años.

Las protestas se han repetido en otras ocho capitales brasileñas --Belo Horizonte, Porto Alegre, Porto Velho, Florianópolis, Fortaleza, Curitiba, Macapá y Cuiabá--, de acuerdo con la prensa brasileña.

Entre estas manifestaciones, destacan las concentraciones de jueces federales en apoyo a su colega Sergio Moro, cuyas investigaciones sobre la red de cobro de sobornos a cambio de contratos públicos de Petrobras ha estrechado el cerco sobre el Gobierno.

ACOSADOS

Lula ha sido investido este jueves jefe de la Casa Civil, un día después de que Rousseff confirmara que se incorporaría al Gobierno con "los poderes que sean necesarios" para llevar adelante su trabajo, centrado en superar la crisis política y económica.

De esta forma, Lula se ha convertido en aforado, lo que significa que las pesquisas relativas al ex mandatario dirigidas por Moro por su presunta implicación en el escándalo de la petrolera estatal pasarán ahora al Tribunal Supremo.

Lula fue detenido brevemente el pasado 4 de marzo para ser interrogado sobre la propiedad de un tríplex ubicado en el Edificio Solaris, un condominio de lujo de Sao Paulo construido por el grupo de ingeniería OAS, involucrado en el escándalo de corrupción de Petrobras.

Los investigadores creen que Lula es el verdadero dueño del apartamento y que lo habría recibido como pago por ejercer su influencia en la adjudicación de los contratos públicos de Petrobras, de acuerdo con la prensa local.

Las investigaciones contra Lula han aumentado la presión sobre el Rousseff, también cuestionada por 'Lava Jato' y objeto de un proceso de juicio político por maquillar las cuentas públicas de 2014. Millones de brasileños se han manifestado estos días para exigir su dimisión.