BOGOTA (Reuters/EP) - La producción y las exportaciones de café de Colombia, tercer mayor abastecedor mundial del grano, cayeron en junio un 35 y 34 por ciento, respectivamente, frente a igual lapso del 2008, por las lluvias, la baja fertilización y la renovación de cultivos.
En el sexto mes la producción de café bajó a 685.000 sacos de 60 kilogramos, desde los 1,04 millones de sacos cosechados en el mismo mes del 2008, precisó la Federación Nacional de Cafeteros.
En tanto, en el mismo mes, las exportaciones cayeron a 628.000 sacos de 60 kilos, desde los 946.000 sacos en junio del año anterior.
Mientras, en el primer semestre la producción de café colombiano se desplomó un 31 por ciento a 4,24 millones de sacos, en comparación con los 6,11 millones de sacos en la primer mitad del año pasado.
En la misma línea, las ventas externas del grano se contrajeron un 26 por ciento a 4,35 millones de sacos, frente a los 5,85 millones de sacos reportados en entre enero y junio del 2008.
A pesar de la caída en los indicadores, la Federación mantiene una proyección de producción de entre 11 y 11,5 millones de sacos de café para todo el 2009.
"Este comportamiento obedece a los factores que se han mencionado a lo largo del semestre como son el impacto del invierno de los últimos meses de 2008, la baja fertilización y la política de renovación de cafetales, que si bien hoy afecta las cifras de producción, en el futuro se verán los resultados", indicó el gremio en un comunicado.
No obstante, la federación resaltó que pese a la caída en la producción y en las exportaciones, se reportó una mejora en el ingreso de los caficultores, producto del buen comportamiento de los precios en los mercados internacionales y el repunte de la cotización del dólar frente al peso en los primeros meses del año.
Colombia produjo el año pasado 11,4 millones de sacos de café por un valor de 1.953 millones de dólares, el tercer renglón de ingresos por exportaciones después del petróleo y el carbón.
La nación andina tiene alrededor de 900.000 hectáreas cultivadas con cafetales, actividad de la que dependen unas 560.000 familias, cerca de 2,5 millones de personas.