Actualizado 01/07/2009 00:43

Chávez, atento a posible agresión a Zelaya en regreso a Honduras

MANAGUA (Reuters/EP) - El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo el martes que estará atento a cualquier agresión que pudiera sufrir el depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, quien planea regresar a su país tras ser sacado por la fuerza por militares.

Zelaya ha dicho que retornará a Honduras el jueves acompañado del presidente de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y de Ecuador, Rafael Correa, a pesar de que el Gobierno interino advirtió que lo arrestará.

"Estaremos atentos las próximas horas porque un escenario de agresión contra la delegación que va abriría otro tipo de fuerzas de las cuales tengo que pensar pero no quiero ni hablarlas", dijo Chávez a periodistas poco antes de dejar Managua, la capital de Nicaragua.

Chávez estuvo en Managua para participar en una reunión de emergencia del bloque de países izquierdistas ALBA, que decidió retirar a sus embajadores en Honduras.

El canciller interino de Honduras, Enrique Ortez, dijo el martes a la cadena CNN en español que se tienen órdenes de aprehensión en contra de Zelaya por crimen organizado, desvío de recursos, narcotráfico y violaciones a la Constitución.

Chávez dijo que no acompañaría a Zelaya en su regreso al país, de donde el mandatario hondureño fue expulsado el domingo tras el golpe de Estado para ser llevado a Costa Rica.

"Me gustaría ir al lado de Mel (como llaman al presidente Manuel Zelaya), pero no debo, porque se dice que yo soy el culpable, entonces mi presencia puede ser tomada como excusa para escenarios violentos", señaló Chávez.

Zelaya habló el martes ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, que aprobó una resolución para que sus 192 miembros no reconozcan a otro Gobierno en Honduras que no sea el del derrocado mandatario.

Estados Unidos, la Unión Europea y países latinoamericanos han cerrado filas en torno a Zelaya, un cercano aliado de Chávez.

"No podemos permitir que unos locos, porque están locos, vayan a asesinar a un presidente, a sus acompañantes o a secuestrarlos o a meterlos en un calabozo", subrayó el mandatario venezolano.

La crisis política estalló el jueves pasado, cuando Zelaya destituyó al jefe de las fuerzas armadas por negarse a trasladar las urnas para una consulta popular que el mandatario quería realizar con el fin de abrir el camino a la reelección presidencial.