SANTIAGO DE CHILE, 19 Jul. (EP/AP) -
La Corporación Nacional del Cobre (CODELCO) --la mayor productora mundial de cobre-- reanudó hoy negociaciones con los trabajadores subcontratados en un nuevo intento por finalizar una huelga de 24 días.
CODELCO anunció que retomará las conversaciones después de un nuevo compromiso del presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre, Cristián Cuevas, para "deponer los actos de violencia que han afectado, por ejemplo, a la División Salvador".
La ocupación de los caminos de acceso a Salvador (en el norte del país) paralizó esta semana las actividades de esta división, que explota minerales oxidados y sulfurados, con los que produce unas 80.000 toneladas métricas de cobre al año, del total de 1,8 millones que aporta CODELCO a la producción mundial.
En la huelga participan unos 13.000 trabajadores subcontratados por la compañía estatal, quienes demandan mejoras salariales y en bonos relacionados con salud, vivienda y educación.
CODELCO rechaza las exigencias y alega que no puede acceder a peticiones de trabajadores que están en una huelga ilegal y menos entregarles una bonificación en dinero porque no son empleados directos de la compañía.
La empresa tiene 14.000 empleados de planta y 28.000 subcontratados que, en su mayoría, se desempeñan en tareas de limpieza y atención de casinos.
Pese a la paralización, el presidente ejecutivo de la empresa, José Pablo Arellano, aseguró que "las pérdidas son las mínimas" porque no lograron detener las operaciones en todas las divisiones.
Por su parte, la Conferencia Episcopal de Chile se pronunció en la víspera sobre la huelga y en un comunicado expresó que falta mucho por avanzar en la legislación sobre los trabajadores subcontratados.
Así, indicó que en algunas movilizaciones, "la violencia es síntoma de una situación de iniquidad evidente que no ha sido resuelta por nuestra sociedad", además que "los trabajadores tienen el legítimo derecho de movilizarse" pero que "nada justifica la violencia ni el atropello a los derechos de las personas".
El presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, Alfredo Ovalle, discrepó con los obispos y declaró que "hablar de iniquidad me parece un término un poco arriesgado", aún cuando reconoció que hay situaciones de abuso, pero que en general las empresas "aplican la equidad y aplican, sobre todo, responsabilidad social en el trato con sus trabajadores".