Actualizado 22/11/2007 01:09

Chile/Venezuela.-Diputados chilenos rechazan la conducta "de mala educación" de Chávez en la XVII Cumbre Iberoamericana

Legisladores reconocen el papel del Rey en el fortalecimiento del conglomerado de países y dicen que Chávez boicoteó el tema de la cita


SANTIAGO, 22 Nov. (De la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -

La Cámara de Diputados de Chile aprobó este miércoles un acuerdo que rechaza la conducta del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, durante la XVII Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno que se realizó en Santiago entre el 8 y el 10 de noviembre.

En el marco de la reunión anual multilateral, además de haber criticado el tema de la Cumbre, la cohesión social, que había propuesto la presidenta Michelle Bachelet, el gobernante caribeño protagonizó un altercado con el Rey de España, quien le pidió que se callara cuando insultaba al ex presidente del gobierno José María Aznar en una discusión con el actual gobernante, José Luis Rodríguez Zapatero.

Aprobado por 53 votos a favor, 11 en contra y 8 abstenciones, el acuerdo de los diputados chilenos señala que la conducta del mandatario venezolano estuvo "dirigida a boicotear el objeto de la reunión, cual era fomentar la cohesión social para alcanzar sociedades más inclusivas".

Los diputados chilenos dijeron que Chávez incurrió en el comportamiento de "intervenir indebidamente en asuntos bilaterales que sólo competente a Chile y Bolivia", en alusión a las expresiones de otorgar una salida al mar al vecino país.

En los considerandos del acuerdo, junto con destacar el papel del Rey de España en el fortalecimiento del conglomerado Iberoamericano, se expresa que "todo esfuerzo por maximizar los frutos de la reciente Cumbre, han sido groseramente opacados por las actuaciones del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, secundado por los jefes de Estado de Cuba y Nicaragua".

En ese sentido, el texto critica la organización de una 'Cumbre paralela', organizada por los mencionados representantes de Gobierno, en la que también participó el presidente de Bolivia, Evo Morales.

Adicionalmente, se señala que "la actitud del vicepresidente de Cuba y del presidente de Nicaragua, confirman la estructuración de un eje político que trata de obstaculizar el diálogo y el debate de altura, por la vía de la reiteración de actitudes antisistémicas y aún de mala educación, evidenciando la existencia de dos proyectos de desarrollo, definitivamente contrapuestos en nuestra región".