Actualizado 22/09/2009 20:36

La CIDH condena los hechos de violencia en Honduras y pide a Micheletti medir las consecuencias

TEGUCIGALPA, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Luz Patricia Mejías, condenó hoy los hechos de violencia ocurridos frente a la Embajada de Brasil en Tegucigalpa y pidió al mandatario interino, Roberto Micheletti, medir las consecuencias de las acciones que ha emprendido el Ejército contra los manifestantes.

En declaraciones a la cadena Telesur, Mejías recordó que las embajadas son "impenetrables", por lo que rechazó de forma categórica el despliegue de militares y policías en los alrededores de la sede diplomática brasileña donde se encuentra refugiado el mandatario depuesto Manuel Zelaya, quien regresó ayer por sorpresa a Honduras.

Para Mejías el haber dejado sin luz y servicios públicos a la Embajada donde se encuentra refugiado Zelaya, "colocan al Estado de Brasil frente al Estado 'de facto' en una situación compleja", porque además con estas acciones el Gobierno interino está "violando" el derecho internacional y todo los concerniente a las relaciones diplomáticas entre las naciones.

La presidenta de la CIDH recordó que cuando se produjo el golpe de Estado, el pasado 28 de junio, la organización había advertido de que en Honduras se había instalado "un régimen que reprimía, violaba Derechos Humanos, realizaban detenciones masivas y realizaban cierres para tener control de los medios y mantener a la población desinformada".

A su juicio, lo que ha ocurrido en las últimas horas frente a la Embajada de Brasil, donde centenares de personas han sido "reprimidas", ponen en evidencia el "recrudecimiento de la violación a los Derechos Humanos, a través del uso indiscriminado de la fuerza".