Actualizado 31/07/2016 11:29

Los Clinton: ¿Volverán los muros a México?

Mujer en la frontera entre México y EEUU
JOSE LUIS GONZALEZ / REUTERS

   CIUDAD DE MÉXICO, 31 Jul. (Notimérica) -

   La candidatura del multimillonario republicano Donald Trump preocupa a los mexicanos por sus controvertidas declaraciones relacionadas con la construcción de una línea divisoria entre ambos territorios a través de un muro de hormigón.

   Ante esta preocupación no resulta sorprendente que los mexicanos vean en la otra candidata por el Partido Demócrata, Hillary Clinton, la esperanza de poder evitar la actitud de Trump en lo que se refiere a México.

   Sin embargo, ese mismo apellido, Clinton, supone de nuevo un obstáculo en los próximos comicios, ya que a pesar de que sea la mejor alternativa a la sucesión del actual presidente estadounidense, Barack Obama, su marido y expresidente norteamericano Bill Clinton llevó a cabo en su doble mandato --que comprendió los años 1993 y 2001-- unas políticas desfavorables a la migración mexicana.

   En estos dos períodos gubernamentales, Bill Clinton promulgó una legislación aún vigente que facilitó la deportación de dos millones de migrantes durante la presidencia de Obama. De esta forma, durante la última y actual etapa gubernamental norteamericana, se ha seguido la estela que dejó el expresidente con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

   El TLCAN es un acuerdo regional entre los gobiernos de Canadá, Estados Unidos y México para crear una zona de libre comercio con un coste reducido para el intercambio de bienes entre los tres países.

En 1992 los entonces presidentes norteamericano George Bush y el mexicano Carlos Salinas de Gortari firmaron un documento que debía tener la aprobación por parte de los congresos de los dos países. Sin embargo, ese mismo año se celebraron elecciones en EEUU, siendo Bill Clinton el sucesor de Bush en la gobernación del país.

   Asumiendo su nuevo cargo, Bill Clinton anunció futuras modificaciones en el TLCAN, que tendría una negociación adicional relacionada con una posible competencia desleal para los estadounidenses.

   En la Federación Estadounidense del Trabajo y el Congreso de Organizaciones Sindicales (AFLO-CIO) se preocuparon por el posible exilio de diferentes empresas a México con motivo de los salarios bajos de este país. Por ello, un año más tarde, se negociaron diferentes políticas de posible aplicación para controlar este tema, además de añadir otros relacionados con el medioambiente.

   Así, algunas empresas estadounidenses vieron en este tratado firmado por los países vecinos la posibilidad de devaluar sus productos, por lo que se levantaron ciertas restricciones encaminadas a la importación de productos mexicanos, como es el caso de la producción de naranja y azúcar de Florida.

   De esta manera, el ascenso de Hillary Clinton a la presidencia del Gobierno de EEUU podría continuar este tipo de políticas que supusieron un paso hacia atrás en el comercio exterior de su país vecino. Los límites que estableció el expresidente podrían reforzarse con su mujer en el poder.

   El sucesor de Bush mandó la construcción de un muro en California en 1993 como parte de la 'Operación Guardián'. Esta valla fronteriza recorría toda la frontera del sur del país pero en la actualidad solo divide Arizona y Sonora, Nuevo México y la Baja California, Texas y Chihuahua; y California y Tijuana.

   Desde el comienzo de su construcción, el muro ha sido el protagonista de más de 10.000 muertes de mexicanos que intentan buscar mejores condiciones de vida en el país vecino y no llegan a alcanzarlo. Además, la cifra de fallecidos se ha disparado en los últimos años por el aumento del tráfico de drogas.

   Otra de las estrategias de freno de migrantes en las fronteras del país recibe el nombre de 'Operación Río Grande'. Sin embargo, a pesar del reforzamiento de la seguridad en dichas construcciones, el flujo de personas no disminuyó.

   Además, cabe destaca la reforma de inmigración ilegal y Ley de responsabilidad inmigratoria promulgada en 1996 que permite las detenciones basadas en delitos e impide el estado de residencia a aquellos que proporcionen identidades falsas en los documentos de inmigración. Como resultado, las personas deportadas no podían volver a EEUU en los tres años siguientes.

   Entonces la pregunta es: ¿qué pasará si Hillary Clinton gana las elecciones?. Las dudas rodean a la candidata demócrata a pesar de que en la Convención Nacional Demócrata aseguró que EEUU no construirá ningún muro y que abrirá vías a la naturalización de millones de inmigrantes que contribuyen a la economía del país, según informa el diario hondureño 'La Tribuna'.

   La construcción de una nueva frontera entre México y EEUU es un arma de doble filo para Clinton. A través de su negativa, se sobrepone a la imagen que quiere dejar Trump en relación al territorio colindante pero los acontecimientos relacionados con las políticas de su marido quedan patentes en las enormes masas de mexicanos que fueron deportados.

   Por su parte, Hillary comentó en esta congregación que durante los 100 primeros días de su gobierno presentará una propuesta de reforma migratoria que abra las vías a muchos de los 11 millones de inmigrantes que viven sin autorización en el país.