BOGOTÁ, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
La senadora colombiana Piedad Córdoba ha pedido este martes al Gobierno de Álvaro Uribe convocar "a la mayor brevedad" una reunión en la que se concreten las garantías de seguridad en la misión humanitaria que se encargará de recibir a los dos soldados que serán liberados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"Esperamos que el gobierno nacional a la mayor brevedad convoque a una reunión en la cual se acuerden los protocolos de protección y de seguridad para el desarrollo de la misión humanitaria", señala un comunicado divulgado por Córdoba.
La senadora, que dirige la organización Colombianos y colombianas por la paz, aplaudió la celebración este martes del encuentro entre los delegados del Comité de la Cruz Roja Internacional (CICR), de la Iglesia Católica y el alto comisionado de paz, Frank Pearl, en el que se dieron los primeros pasos para activar esta comisión.
Esta es la segunda reunión --la primera en la que participa Pearl-- que se celebra para hablar sobre las gestiones que permitirán llevar adelante la misión humanitaria que se encargará de recibir a los soldados Pablo Emilio Moncayo y Josué Daniel Calvo, así como los restos del mayor Julián Ernesto Guevara.
Córdoba ha calificado como un "un gesto esperanzador" los recientes anuncios del Gobierno de Uribe al eliminar todas las restricciones y condicionamientos, a fin de que el CICR, al Iglesia Católica y la senadora puedan iniciar las gestiones para la liberación de los dos rehenes.
Finalmente, dijo que continuarán con "el diálogo epistolar con las guerrillas colombianas y su papel facilitador para dar fin al dolor que sufren las familias de los policías y soldados cautivos, los presos y presas políticas y la población civil afectada por el conflicto armado".
Hace más de siete meses, las FARC anunciaron la liberación de Moncayo --secuestrado hace casi 12 años-- y de Calvo --cautivo desde abril de este año-- además de la entrega de los restos del mayor Guevera, como un gesto unilateral con el que intentan convencer al Gobierno para que acceda al intercambio de rehenes por rebeldes presos.