BOGOTÁ, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) ha propuesto este sábado al Gobierno colombiano la "autonomía" de los territorios campesinos para certificar su reconocimiento político. Este domingo concluye la primera fase del diálogo que comenzó en noviembre y que se reanudará el 18 de febrero.
En un comunicado, el jefe negociador de la guerrilla, 'Iván Márquez', ha desgranado una nueva lista de propuestas presentadas a la delegación del Gobierno presidido por Juan Manuel Santos en las negociaciones que se celebran en La Habana (Cuba).
En ella, según destaca 'Iván Márquez', las FARC pretenden garantizar "el reconocimiento político y de todos los derechos del campesino" y apelan por "dinamizar" el proceso y "buscar fórmulas" que acerquen las posturas entre la guerrilla y el Gobierno en el diálogo de paz.
Así pues, las FARC exigen una "autonomía política, administrativa, económica, social, ambiental y cultural, y en la administración de justicia a través de los mecanismos de la justicia comunitaria" para los territorios campesinos que revierta en "la capacidad de autogobierno, autogestión y autodeterminación" de estas comunidades dentro del marco legal colombiano.
Con dicho fin, la guerrilla incide en que el Gobierno de 'luz verde' a la "constitucionalización de la figura del territorio campesino" y a la protección de dichas poblaciones mediante la creación de "zonas de producción campesina de alimentos".
Las FARC han hecho de la defensa del desarrollo rural una de sus principales banderas en los diálogos de paz con el Gobierno y, al mismo tiempo, el primer asunto de la agenda bilateral y uno de los principales puntos de fricción, en especial en lo que se refiere a la gestión y el estatus estratégico de las comunidades campesinas que habitan en las áreas rurales de Colombia y donde la guerrilla goza de mayor respaldo.
En aras de transformar las conversaciones entre el Gobierno y las FARC en un proceso de diálogo "abierto" y "democrático", la guerrilla ha propuesto en reiteradas ocasiones la participación de representantes de los indígenas y de los campesinos, al igual que otras organizaciones sociales. Santos respondió con la apertura de una web en la que los colombianos podían trasladar sus propuestas de paz a los equipos negociadores en La Habana.
A la participación política se suma a la agenda de las negociaciones el problema del narcotráfico, la atención a las víctimas de las FARC y los mecanismos de verificación de los acuerdos.