Actualizado 12/04/2010 22:20

Colombia.- Moncayo y Calvo anuncian su reincorporación al Ejército de Colombia tras ser liberados por las FARC


BOGOTÁ, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -

El sargento Pablo Emilio Moncayo y el soldado Josué Daniel Calvo anunciaron este lunes en rueda de prensa que se reincorporarán al Ejército colombiano después de pasar 12 y un año de cautiverio, respectivamente, en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

En una rueda de prensa donde relataron sus experiencias personales a los medios de comunicación, los militares anunciaron que se reincorporarán a las filas del Ejército después de agotar uno de los periodos vacacionales que han acumulado por sus años de cautiverio. En el caso de Moncayo, será recibido con la guardia de honor después de pasar parte de sus vacaciones en el extranjero, según informó la emisora local Caracol Radio.

En lo que se refiere al relato de su secuestro, el sargento relató que durante siete meses tuvo que caminar con ayuda de muletas debido a las cadenas que le ataron a uno de los tobillos para aumentar el control sobre sus movimientos después de que otro militar secuestrado, Luis Alberto Erazo, intentara fugarse.

"Acusaron a mi sargento Erazo de quererse fugar. Nos encadenaron un extremo al tobillo y la pierna cambio de color, se puso morada, negra, y estuve siete meses caminando con muleta" por culpa de las cadenas, dijo Moncayo.

Interrogado por el potencial de las FARC, el militar sijo que desconoce el potencial del grupo armado ya que durante su secuestro le matuvieron aislado durante largos periodos por lo que no puede dar detalles sobre la cantidad de guerrilleros o su potencial armamentístico.

El sargento lamentó que a pesar de que en varias ocasiones el Ejército se había aproximado al campamento donde permanecía retenido nunca pudieron emprender una operación de rescate. Sin embargo, acumuló pruebas de vida de los militares que estaban también secuestrados por si en algún momento se desencadenaba el operativo.

Moncayo explicó que momentos antes de que se produjera su liberación los guerrilleros encargados de ello le quitaron las pruebas de supervivencia del coronel Duarte, el mayor Hernández, Luis Alberto Erazo y Libio José Martínez. "Mis compañeros habían preparado material para traer, pero el dia de la liberación las Farc me quitaron el maletín", apuntó.

MENSAJE A URIBE

En lo que se refiere a la vertiente política de su liberación, el sargento aclaró que no saludó al presidente, Álvaro Uribe, para ser coherente con las declaraciones que había hecho anteriormente en un vídeo que sirvió como prueba de que continuaba vivo y en las que instaba al Gobierno colombiano a abrir la vía de las negociaciones de paz a través del canje humanitario.

Moncayo dijo que no quiere "parecer lambón (un adulador)" después de las palabras que había pronunciado, al tiempo que afirmó respetar las opiniones de aquellos colombianos que se oponen al intercambio de secuestrados por presos de la guerrilla.

TRES INTENTOS DE ASESINAR A CALVO

Por su parte, el soldado Josué Daniel Calvo indicó que durante el tiempo que permaneció retenido las FARC intentaron asesinarle hasta tres veces, aunque sin éxito, ya que las armas se encasquetaron impidiendo que la bala se diparara para acabar con la vida del militar.

El soldado explicó que los intentos de asesinato se produjeron el mismo día de su secuestro, primero con una pistola que le apuntaba al pecho y que falló hasta en dos ocasiones y después con un fusil que tampoco se activó al presionar el gatillo.

Calvo relató que durante su cautiverio estuvo aislado, apartado del resto de los rehenes, debido a su delicado estado de salud a causa de la herida de bala que tenía en una de las piernas fruto de su secuestro. "Durante siete meses me movieron en hamaca y me hicieron las curas en el campamento", comentó.

Además, aseguró que recibía constantes amenazas de muerte por miedo a que pudiera protagonizar un intento de fuga, lo que le llevó a pasar varias noches encadenado. "Todo el tiempo me tenían amenazado de muerte y que si había un operativo de rescate me mataban", aseveró.