Actualizado 02/06/2011 11:55

Colombia.- Las ONG denuncian que en los 300 primeros días de Santos han continuado los asesinatos de activistas

MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de organizaciones no gubernamentales españolas y europeas aseguró este jueves que en los 300 primeros días de Juan Manuel Santos como presidente del país suramericano han continuado los asesinatos de líderes sindicales, defensores de víctimas, dirigentes campesinos y miembros de las comunidades indígenas y afrocolombianas y han exigido al Gobierno español que presione al colombiano en favor de los Derechos Humanos.

"La crisis humanitaria, agravada por la pervivencia del conflicto interno armado que atraviesa Colombia, cada día se acrecienta sin que el Gobierno de ese país haga nada para impedirlo, y sin que la comunidad internacional exija a Bogotá cambios inmediatos que garanticen el respeto a la vida de quienes defienden los derechos de las víctimas", afirmaron las ONG en un comunicado.

"Las cifras desmienten el discurso oficial del presidente Santos", prosiguieron. "En sus primeros 300 días de gobierno, han continuado los asesinatos contra líderes sindicales, defensores de víctimas, líderes campesinos de los procesos de restitución de tierras, y las agresiones contra poblaciones indígenas y afrocolombianas", aseguraron.

Aparte, las organizaciones españolas integradas en la Plataforma Justicia por Colombia, una de las firmantes del documento anexo, han pedido expresamente al presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que, "exija al presidente Santos un verdadero cambio y que proteja de verdad a quienes están defendiendo a las víctimas del conflicto armado en Colombia".

En un comunicado difundido este jueves por la plataforma, las ONG españolas también han solicitado al Gobierno de Zapatero que en sus relaciones bilaterales con Colombia, "dé prioridad a los Derechos Humanos por encima de los buenos resultados en las relaciones comerciales".

"España, país miembro de la UE", continúan, "gracias a su relación de privilegio en sus relaciones con Iberoamérica, en lugar de dar la palmada en la espalda al gobierno colombiano, debería estar exigiéndole resultados concretos en la protección a los Derechos Humanos", añadieron.