Actualizado 28/08/2012 22:53

Colombia.- El presidente del Supremo aboga por incorporar a los rebeldes de las FARC en la vida democrática y política


BOGOTÁ, 28 Ago. (Colprensa/EP) -

El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Javier Zapata, ha abogado por incorporar a los rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la vida política y democrática, además de otorgarles beneficios legales a aquellos que hayan cometido delitos de lesa humanidad, tal y como se hizo con los paramilitares.

"Ellos (los guerrilleros) también son colombianos y colombianas, se trata que participen políticamente en el desenvolvimiento del Estado y la sociedad y hacer uso de los derechos políticos", ha indicado Zapata.

Santos anunció el lunes que su Ejecutivo ha mantenido "conversaciones exploratorias" con las FARC para buscar una solución a cinco décadas de conflicto armado. Los detalles de las negociaciones los dará a conocer más adelante, pero según ha aseverado, se está "obrando con prudencia, seriedad y firmeza, anteponiendo siempre el bienestar y la tranquilidad" de los colombianos.

Zapata ha insistido en que se debería aprovechar esta oportunidad para buscar alternativas para que aquellos rebeldes que hayan cometido delitos de lesa humanidad puedan ser objetos de los beneficios del eventual proceso de paz.

Actualmente los crímenes de lesa humanidad y los crímenes de guerra, por estar tipificados en el Derecho Penal Internacional, no pueden ser objeto de conciliación.

"Pero la paz es tan alta y tan importante que ya dentro de una consideración política también tendría que superarse esa gran barrera porque de otra manera, de antemano, si eso fuera tan férreo y tan inflexible sería infructuoso", ha señalado el magistrado.

Zapata ha indicado que los beneficios legales deberían ser uno de los principales temas a tratar en los diálogos ya que "para nadie es un secreto que las guerrillas colombianas han cometidos delitos de esa clase y por lo tanto, si hay realmente un verdadero propósito de paz, este es el momento para acudir a esta nueva oportunidad".

Durante el Gobierno de Álvaro Uribe (2002-2010), se llevó a cabo un proceso de paz con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) que contemplaba algunos beneficios legales a aquellos paramilitares que confesaran sus crímenes y colaboraran en las investigaciones.

Los acercamientos entre el Gobierno y la guerrilla, ha indicado Zapata, suponen una "luz al final del túnel" para generaciones como la suya que han vivido el conflicto armado desde el principio.

"Ha habido intentos pero no ha habido un diálogo sincero, ojalá si lo haya en esta oportunidad de lado y lado. Todos hemos madurado en entender que la paz no es una palabra, sino una tarea casi heroíca por lo que hay que restaurar dolor de lado y lado", ha expresado.