BOGOTÁ, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, ha exigido este lunes a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberar a todos los secuestrados, incluyendo al cabo Pablo Emilio Moncayo, que ya lleva 12 años en poder de la guerrilla.
"Estamos en mora de que los liberen ustedes saben que el gobierno ha atendido todas las exigencias y no los han liberado. ¿Por qué? Estamos en mora de que los liberen", expresó Uribe en declaraciones a la prensa.
Así, Uribe se refirió a las condiciones impuestas por las FARC que los pasados meses de abril y junio anunciaron su disposición de liberar a Moncayo y al soldado Josué Calvo, pero no fue sino hace unos días que Bogotá anunció que daría todas las garantías para realizar el operativo.
El mandatario colombiano, que se abstuvo de dar más declaraciones sobre este asunto, ha dicho en otras ocasiones que está a la espera de la guerrilla para activar la misión humanitaria para ir a buscar a los dos militares y los restos del mayor Julián Ernesto Guevara.
Pero las FARC han insistido en que Uribe ha "obstaculizado" este proceso por no haber programado antes las reuniones con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Iglesia Católica y la senadora Piedad Córdoba, que servirán como garantes del operativo.
Córdoba, por su parte, ha dicho que está a la espera de que el Gobierno tome sus decisiones para entonces pedir a la guerrilla que entregue las coordenadas del lugar donde dejarán a Moncayo y Calvo, de la misma manera como se ha hecho en otras operaciones de este tipo.
Esta misma visión es compartida por el padre de Moncayo, el profesor Gustavo Moncayo, quien insiste en que es el Gobierno el que ha puesto "obstáculos" que han alargado el proceso de liberación ocho meses "sin que hasta ahora haya nada concreto", pese a que las FARC "sí han reiterado su voluntad" de entregar a los dos rehenes.
Pablo Emilio Moncayo y Josué Calvo forman parte del grupo de 24 secuestrados canjeables conformado exclusivamente por militares y policías que las FARC pretenden intercambiar por guerrilleros presos, en el marco de un eventual intercambio humanitario que ha sido insistentemente rechazado por Uribe.