BUENOS AIRES (Reuters/EP) - La justicia argentina condenó el miércoles a un sacerdote a 15 años de prisión por el delito de abuso sexual de menores en un hogar que tenía a su cargo, en otro escándalo de pedofilia que golpea a la Iglesia Católica.
El padre Julio Grassi, quien mantuvo su inocencia a lo largo de los nueve meses que duró el proceso judicial y se defendió en numerosas participaciones en programas de televisión, quedará en libertad hasta que se lleve adelante el proceso de apelación, aunque no podrá abandonar el país.
El fallo lo consignó como "autor penalmente responsable de los delitos de abuso sexual agravado por resultar sacerdote, encargado de la educación y de la guarda del menor víctima" en uno de los tres casos presentados por la acusación.
"Estoy atónito, helado, y amargado por esto", dijo Grassi a un canal de televisión.
Grassi, de 52 años, tenía a su cargo la fundación "Felices los Niños", que alberga a numerosos infantes en la provincia de Buenos Aires, donde estalló el caso en el 2002.
Tras la lectura del veredicto, se produjeron algunos incidentes en las puertas del tribunal entre partidarios del sacerdote y quienes aplaudían la condena de Grassi.
Los fiscales de la causa, que habían pedido 30 años de condena en 17 delitos investigados, dijeron que existía riesgo de fuga de Grassi, al ser dejado en libertad hasta tanto se defina la apelación.
El sacerdote, que deberá presentarse mensualmente ante el tribunal, podría sin embargo visitar las instalaciones de la fundación que creó en 1993.