Actualizado 09/03/2016 16:01

Correa dice que la aprehensión de Lula es "una estrategia para destrozar su reputación"

Rafael Correa
COLPRENSA

   QUITO, 9 Mar. (Notimérica) -

   El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha rechazado la aprehensión del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva la semana pasada y ha sostenido que este tipo de acciones sólo son "una estrategia" de la derecha para "destrozar la reputación" de los líderes de izquierda en el continente americano.

   El mandatario ha cuestionado que la aprehensión del expresidente se diera precisamente después de que Lula da Silva anunciara que sería candidato en las próximas elecciones en ese país. "Todo es una estrategia para destrozar la reputación, es la judicialización de la política", ha explicado, refiriéndose a la falta de apoyos del partido oficialista en el Congreso y a un fiscal que es "enemigo del gobierno".

   "Hay que reflexionar muy fuertemente. Lo que se hizo con Lula es atentado a los Derechos Humanos. Ustedes creen que Lula va a huir si lo llaman a declarar, pero fueron a inspeccionar su casa, lo llevaron detenido y todo eso era para humillarlo, para desprestigiarlo. Es parte de la persecución de las estructuras de la vieja América Latina contra los líderes de la izquierda", ha explicado.

   Correa ha señalado que el objetivo de la derecha es poner fin a los procesos de cambio que se han llevado adelante en América Latina en los últimos años y que esta se ha articulado "nacional e internacionalmente" para combatir a la izquierda con estrategias y discursos que "nos hacen añorar el pasado".

   "Se ve que hay una audacia y una nueva ofensiva de esa derecha con más ínfulas, con más energía, con más recursos, más estrategia, más discursos. Todos hablan lo mismo, desde la Tierra del Fuego hasta Río Grande, toda la derecha continental hablan lo mismo", ha explicado el jefe de Estado en una rueda de prensa de la que ha informado Andes.

   Correa ha recordado que hace unos años se aplicó una estrategia similar con la expresidenta de Argentina Cristina Fernández, con el presidente de Bolivia, Evo Morales, e incluso con él mismo, cuando en la última campaña electoral se difundió que supuestamente tenía dos cuentas bancarias en Suiza.

   Frente a ello, Correa ha manifestado que es necesario que la izquierda se mantenga unida y que se realicen nuevas reuniones entre los líderes de izquierda para definir acciones y construir discursos que permitan enfrentar los intentos de desestabilización.