Actualizado 01/04/2011 23:40

C.Rica.- Chinchilla insta al Congreso a renovar el convenio de vigilancia conjunta con EEUU


SAN JOSÉ, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, ha responsabilizado al Congreso del retraso en la renovación del Convenio de Patrullaje Conjunto con Estados Unidos en aguas costarricenses con el uso de buques y ha hecho un llamamiento a los legisladores para que den luz verde a esta prórroga.

"Me da muchísima vergüenza porque no hay consecuencia entre lo que algunos políticos le dicen al país y lo que están haciendo con los hechos", ha expresado Chinchilla al pedir "disculpas públicas" porque los diputados no han sido "capaces de autorizar un patrullaje conjunto".

Chinchilla ha lanzado estas críticas en el acto de inauguración de una nueva estación para el Servicio Nacional de Guardacostas, ubicada en Caldera, Esparza, y donada por Estados Unidos a Costa Rica, informa este viernes el diario local 'La Nación'.

La mandataria ha dejado claro que le "consta la voluntad de algunos diputados porque el plan avance", pero lamenta que otros legisladores no hayan manifestado las mismas intenciones. En este sentido, ha anunciado que convocará a los congresistas para que se reúnan y aprueben la extensión de este acuerdo con Washington.

"Voy a hacer unas llamadas en los próximos días. Están pidiendo (los diputados) rutas de patrullaje, solo falta que algún día nos pidan las órdenes de operación", ha destacado.

El Convenio de Patrullaje Conjunto suscrito entre Costa Rica y Estados Unidos entró en vigor en 1999 con el objetivo de establecer mecanismos comunes contra el tráfico de drogas y otros delitos que afectan a la región centroamericana.

El pasado diciembre, el Parlamento en San José renovó el acuerdo por un plazo de seis meses, pero solo para que 46 naves del Servicio de Guardacostas y de efectivos norteamericanos entren a su territorio, impidiendo el acceso de 26 barcos de guerra que Chinchilla desea que también formen parte del patrullaje.

A mediados de 2010 los diputados autorizaron la llegada a costas costarricenses de 7.000 efectivos, 46 buques, más de 200 helicópteros, 10 aviones Harrier y dos submarinos, según precisa la agencia Prensa Latina.