MANAGUA, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
Sectores extremistas de Costa Rica estarían interesados en provocar choques armados en la frontera con Nicaragua para empeorar la situación que ambos países mantienen con respecto al conflicto limítrofe, según anunció el jefe de Relaciones Públicas del Ejército nicaragüense, Juan Ramón Morales.
Según el portavoz militar, estos grupos estarían presionando al Gobierno de Laura Chinchilla en medio de "intereses oscuros ligados al narcotráfico", según declaraciones citadas por el diario nicaragüense 'La Prensa'.
Morales reveló estas pretensiones a pocas horas de que ambos países asistan a las audiencias en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), después de que Costa Rica denunciara a Nicaragua por el dragado del río San Juan y que fue llevada en forma de reclamación ante la Organización de Estados Americanos (OEA) por considerarlo como una invasión miliar a su territorio.
El portavoz militar explicó que sus declaraciones se basan en informes de Inteligencia en los que se habrían planteado varios escenarios posibles como ataques a puestos fronterizos y fuerzas militares del Ejército de Nicaragua.
En esos informes destacan posibles provocaciones, tales como las que ocurrieron a finales de diciembre pasado, cuando dos embarcaciones y una avioneta costarricense pretendieron incursionar en aguas y espacio aéreo de Nicaragua, recordó Morales.
El portavoz del Ejército resaltó que una de las posibilidades sería la de "provocar un autoataque a puestos de las fuerzas de seguridad costarricense, con vinculación de sicarios del narcotráfico, para inculpar al Gobierno de Daniel Ortega", para "generar una situación en otra escala superior".
Según Morales, los sicarios podrían hacer uso de vestimentas del Ejército y de la Policía para provocar una respuesta internacional. El trasfondo de esto es "hacer uso de la información para manipular a nivel internacional, presionar a la OEA y la Organización de Naciones Unidas para que intervengan fuerzas extranjeras en el conflicto", señaló.
EN ALERTA
En este contexto, Morales informó de que el portavoz del Ejército de Nicaragua, Julio César Avilés, giró instrucciones a los jefes de las unidades territoriales, oficiales y tropas del Destacamento Militar Sur y de la Fuerza Naval para que estén "atentos", sean "cuidadosos" y actúen "con cautela" ante "cualquier provocación y al mismo tiempo estar prestos para que, si hay una situación, dar una respuesta correcta" para impedir la violación de su soberanía.
Asimismo, indicó que las intenciones de Nicaragua no han sido en ningún momento "violar la soberanía de Costa Rica" y anunció que Nicaragua mantendrá su "pleno ejercicio de soberanía", tanto en su espacio "marítimo" como "terrestre".
Por su parte, el ministro de Seguridad costarricense, José María Tijerino, afirmó al diario local 'La Nación' que se están construyendo helipuertos para constituir "un sistema de defensa" con el objetivo de movilizarse a lo largo y ancho del territorio que ambos países comparten, cerca de la zona de conflicto.
"Haremos lo que sea necesario. El Gobierno está decidido a defender la integridad territorial. No escatimaremos esfuerzos en la defensa de la soberanía del territorio nacional", advirtió Tijerino.
En este sentido, el ministro explicó que a estas obras se les van a unir la construcción de una mallas que controlarán el ingreso fluvial en territorio costarricense a los ríos Colorado, San Carlos y Sarapiquí.