MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
Cruz Roja Española ha explicado este jueves que los ex presos políticos cubanos acogidos en España y sus familias tendrán que ser trasladados a otras provincias porque en Madrid la organización no dispone de "recursos suficientes" y ha señalado que el hostal en que se encuentran, un centro de "acogida excepcional", era el único lugar donde podían recibirlos a todos juntos.
En declaraciones a Europa Press, un portavoz de la organización, Miguel Ángel Rodríguez, ha señalado que la Cruz Roja está haciendo un 'mapeo' de todas las plazas disponibles "tanto en centros de acogida como en pisos" en el resto del país para después ofrecérselas a los disidentes y tratar de "conciliar sus prioridades con la disponibilidad".
"Los recursos en Madrid son escasos para un número tan elevado de personas", ha apuntado Rodríguez, para incidir en que Cruz Roja "tiene muchos más recursos" fuera de la capital, que se asignarán "en función del número de personas, sus intereses y el número de plazas disponibles".
En cuanto al hostal en el que actualmente se encuentran los ex presos y sus familias --un total de 77 personas--, Rodríguez aseguró que allí las condiciones "son muy dignas" y señaló que se trata de "un recurso más" que la organización utiliza "como centro de acogida excepcional" y "no sólo para personas inmigrantes".
"Se trata de una primera acogida", añade el portavoz, para afirmar que "probablemente a partir del lunes" se iniciarán las conversaciones con los ex presos políticos y los trámites para su traslado a los lugares de acogida donde iniciarán su andadura en España.
Según dijo, pese a las críticas vertidas por alguno de los ex presos este jueves en rueda de prensa, "ninguno ha hecho ninguna queja directamente a la organización" por el hostal en el que están acogidos.
En una rueda de prensa organizada por Reporteros Sin Fronteras, uno de los ex presos, Normando Hernández, denunció la "falta de privacidad" del hostal, donde tienen que compartir habitaciones y apuntó que en su caso, será trasladado a un centro en Cullera (Valencia) donde tendrá "las mismas condiciones que ahora".