Actualizado 09/10/2008 02:53

Cuba.- Cuba aumenta las raciones de alimentos ante la escasez producida por los huracanes

LA HABANA, 9 Oct. (Reuters/EP) -

Las frutas y vegetales son cada vez más difíciles de encontrar en Cuba después de que dos huracanes destrozaron las cosechas, pero el Gobierno está recurriendo a sus reservas para reforzar la ración mensual de alimentos que los cubanos han recibido durante décadas.

Funcionarios indicaron ayer que las importaciones se incrementarían cuando sea necesario para que nadie pase hambre, lo que podría ocurrir en diciembre cuando se agoten las reservas de alimentos, según cálculos de diplomáticos en La Habana. Un sondeo en las principales ciudades del país indicó que el suministro de frutas y vegetales mermó, incluso en el usualmente bien abastecido mercado negro, pero que los carbohidratos y las proteínas aún pueden ser encontradas con cierta dificultad.

"El problema es que tienes que estar en los mercados cuando algo viene, porque el suministro es irregular", declaró Carlos Peña, un trabajador estatal en la provincia de Holguín. "Pero, hasta ahora, al final puede encontrar lo que usted necesita", agregó.

HURACANES DEVASTADORES

Los huracanes 'Ike' y 'Gustav' golpearon Cuba en un plazo de 10 días a partir del 30 de agosto, causando pérdidas por unos 5.000 millones de dólares (3.672 millones de euros) a la economía, incluyendo la destrucción del 30 por ciento de las cosechas. Los cubanos dicen que la ración mensual que distribuye el Gobierno a precios subsidiados ofrece alimentos básicos para dos semanas y deben complementarla adquiriendo más comida.

En gran parte del país, la ración mensual fue incrementada con una cantidad adicional de arroz, frijoles, azúcar, aceite para cocinar, algunas latas de pescado y carne, galletas y otros alimentos básicos, de acuerdo con las personas entrevistadas. Según dijeron, el reforzamiento de la dieta está previsto hasta marzo próximo, cuando, según cálculos del Gobierno, debe aliviarse la escasez de alimentos.

En las pocas provincias donde los huracanes provocaron daños menores, entre ellas La Habana, las raciones no fueron aumentadas y algunos alimentos que normalmente se destinaban a la capital han sido desviados a zonas más necesitadas del país. Como resultado de ello, los mercados de alimentos de La Habana han estado mucho más desabastecidos que antes de las tormentas.

COLAS PARA COMPRAR LECHUGA

En uno de los huertos urbanos de La Habana creados para aumentar la oferta de alimentos durante la crisis que siguió al colapso de la Unión Soviética en 1991, al menos 100 personas hacían cola ayer para comprar lechugas, uno de los pocos productos disponibles. "No creo que tengamos suficiente lechuga para toda la gente que está en la cola", afirmó, aun así, uno de los vendedores.

La Unión Soviética era el principal aliado y benefactor de Cuba en el momento de su desintegración, precipitando la economía de la isla en una crisis que se conoce como "período especial". En medidas que algunos críticos aseguran que sólo empeoraron el desabastecimiento inducido por los huracanes, el Gobierno ha decretado un control de precios para ciertos alimentos básicos y limitado la cantidad de productos como el arroz que cada persona puede comprar.

Además está persiguiendo las ventas fuera del sistema de distribución controlado por el Gobierno y presionando a los agricultores para que sólo le vendan al Estado. Los vendedores ambulantes han desaparecido en todo el país y se ha reducido la oferta en los mercados particulares.

Evelio Cisneros, un residente de la ciudad de Camagüey, dijo que encontró el martes arroz y frijoles en un mercado estatal y luego pudo comprar carne de cerdo y aguacate en un punto de venta privado. "Hay muchos menos (productos) desde los huracanes, pero hay comida a precio decente para comprar", añadió.

El Gobierno también ha emprendido un programa para sembrar alimentos de rápido crecimiento, tales como la calabaza y el boniato, que deberían estar listos para la cosecha de fin de año. José Luis Rodríguez, ministro de Economía y Planificación, dijo esta semana que "el país no escatimará esfuerzos" para atender a las necesidades de la población. "Enfrentamos un fenómeno inédito en nuestra historia climatológica (...) pero no vamos a retroceder, ni se va a crear una situación desesperada", indicó Rodríguez a medios locales.