Actualizado 19/12/2006 21:19

Cuba.- Fracasa el intento de PP y PSOE de consensuar en el Congreso una posición común española sobre el futuro de Cuba

El PSOE admite que Fidel Castro es un "dictador" pero critica que el PP ofreciese sólo "consensos trampa"

MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -

El pleno del Congreso de los Diputados rechazó hoy una moción del Partido Popular sobre el futuro de Cuba después de que no llegase a un acuerdo de consenso con el PSOE y otros grupos de la Cámara Baja.

La votación final contó con 132 votos a favor, 165 en contra y 17 abstenciones, de modo que quedó finalmente rechazada. La nueva portavoz del PSOE en la Comisión de Exteriores del Congreso, Fátima Aburto, se quejó de la falta de voluntad del PP para alcanzar un consenso y advirtió de que su homólogo 'popular', Jorge Moragas, sólo les había ofrecido "consensos trampa".

"Nos parecía poder llegar a un consenso pero la moción que presenta es imposible de tratar", indicó a la bancada del PP. En su opinión, no se puede comparar la situación del tardo franquismo español con la que vive Cuba en estos momentos. "La transición española fue una historia de éxito pero no debe ser un ejemplo ahora" para la isla, dijo Aburto.

Pese a que subrayó que el PSOE también considera a Fidel Castro como un "dictador sin ningún tipo de distinción", censuró el intento del PP de insertar una "injerencia política" que critica al presidente interino, Raúl Castro, y al grupo de siete miembros de que el líder cubano estableció tras su enfermedad para llevar los asuntos del país.

"Desde la izquierda siempre trabajaremos para conseguir llegar a una postura que sea útil para Cuba, un país muy querido por nosotros", concluyó. Por su parte, Rosa Bonas (ERC) insistió en que no se pida elecciones a Cuba viendo el ejemplo de los últimos comicios en Irak o los territorios palestinos.

"Ahora les obligamos a convocar elecciones, pero dejemos que ellos elijan cuando quieren elecciones, que elijan su sistema", recomendó aludiendo a los ciudadanos cubanos.

Mientras, Josep Antoni Duran Lleida (CiU) negó que la moción presentada por el PP pretenda reforzar "cualquier tipo de embargo" como el que Estados Unidos impone en la actualidad contra Cuba.

"CiU ha defendido siempre que la política respecto a Cuba no debe ser polémica entre grupos españoles ni motivo de instrumentalización. Lo mejor era un consenso. Nosotros lo hemos intentado y no ha sido posible", aseguró antes de anunciar que su grupo parlamentario se abstendría en la votación.

En su opinión, una Cámara como la española no debería "escandalizarse" por pedir que haya libertad en Cuba y elecciones democráticas en el futuro.

Gaspar Llamazares (IU-ICV) lamentó que la estrategia del PP en esta cuestión es que "la política internacional para Cuba se homogenice con la política internacional para Cuba del Gobierno estadounidense". Por ello, adelantó que no aceptaría "un consenso vicario de la política de intervención de Estados Unidos".

"Es una iniciativa frívola y anacrónica cuando los Estados Unidos van en un sentido, ustedes van en otro. Su propuesta es de consenso neocolonial, de consenso para la injerencia y la confrontación", criticó Llamazares.

DEFENSA POR UNA CUBA "LIBRE Y DEMOCRÁTICA"

Previamente, Moragas defendió los puntos de la moción en el Congreso de los Diputados en la que se propuso una posición común española que aboga por una Cuba "libre, democrática e independiente" tras la etapa política de Fidel Castro.

Esta iniciativa era fruto de la interpelación urgente del pasado miércoles del PP al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en la que el diputado 'popular' le ofreció un consenso sobre este punto. "Los delicados momentos que se viven en Cuba suponen una nueva ocasión para que el pueblo español pueda manifestar los especiales lazos de afecto y amistad que le unen al pueblo cubano y sus deseos de libertad, concordia y reconciliación", comenzaba el texto 'popular'.

El principal partido de la oposición estimó que ante el futuro incierto que en estos momentos afronta la isla, resultaba necesario que el Parlamento español transmitiera "un mensaje de unidad" ante la evolución de los acontecimientos y subrayó que este consenso que se ofrece "no supone otra cosa" que recoger el testigo de lo que fue el apoyo de los distintos países europeos cuando en 1975 España atravesó por unos momentos "igualmente difíciles" a los que se viven hoy en la isla caribeña.

El PP propuso que la Cámara Baja asumiera que el futuro de Cuba "deben decidirlo todos los cubanos por medio de un diálogo sin exclusiones y sobre la base del respeto a la independencia y soberanía de la nación cubana" y que no sería posible un diálogo abierto entre cubanos "sin la previa liberación de todos los presos políticos y de conciencia".

Asimismo, opinó que el Gobierno español "debe encaminar sus esfuerzos para que el diálogo entre cubanos se traduzca en una política de reformas democráticas que conduzcan al reconocimiento de partidos políticos, asociaciones sindicales y de medios de comunicación libres e independientes".

A continuación, se instó al Ejecutivo a transmitir en el diálogo crítico que sostenga con las autoridades cubanas de La Habana que el pueblo español y sus instituciones "expresan su respaldo a que el pueblo cubano emprenda la senda de una transición pacífica a la democracia en Cuba".

CONCORDIA ENTRE CUBANOS

El PP pidió que se apoye que la reconciliación y el reencuentro entre todos los cubanos incluya "a aquellos que sufren el exilio y están dispuestos a trabajar pacíficamente por la libertad, la democracia y la concordia entre cubanos". En último término, instó a trasladar a la comunidad internacional y en especial a la Unión Europea esta posición común española.

Con ello, estimó la formación que lidera Mariano Rajoy, se contribuiría a construir un consenso cubano "fundamentado en el reconocimiento en su plenitud del pluralismo político" y que a través de unas elecciones mediante "sufragio universal, libre, directo y secreto", conduzcan a una Cuba "libre, democrática e independiente".