"Espero volver a ver a Ángel Carromero para despedirme", confía Rosa María Payá
MADRID, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
Rosa María Payá, hija del fallecido disidente cubano Oswaldo Payá, concluye esta semana su visita a España "satisfecha" de los apoyos recabados pero dejando "muchas cosas por hacer", relacionadas principalmente con la investigación que la familia quiere impulsar para esclarecer el supuesto accidente de tráfico en el que perdieron la vida el difunto dirigente del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL) y Harold Cepero.
Rosa María Payá llegó a España a mediados de febrero y abandonará el país rumbo a Estados Unidos el próximo miércoles, 3 de abril. Durante estas semanas, ha mantenido reuniones con dirigentes políticos y activistas para defender las libertades y los Derechos Humanos en Cuba e impulsar una investigación internacional sobre el accidente.
Para la hija de Oswaldo Payá, el balance de estas visitas y encuentros "ha sido bueno", especialmente por las intervenciones en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y por las "expresiones de solidaridad y compromiso" manifestadas por varios diputados del Parlamento Europeo.
La ONU ya "ha comenzado a trabajar" en la petición formulada por Payá para una investigación sobre el accidente, mientras que en la Eurocámara hay varias iniciativas sobre la mesa que "comenzarán a hacerse visibles" en las próximas semanas, ha explicado la hija del difunto disidente en una entrevista con Europa Press.
"Agradecemos todo el apoyo", ha añadido, en un agradecimiento que hace extensible también a los senadores de Estados Unidos que han firmado una carta para apoyar dichas pesquisas y al Departamento de Estado norteamericano, partidario también de esclarecer lo ocurrido el 22 de julio de 2012.
Rosa María Payá tiene previsto reunirse con varios congresistas durante su próxima visita a Estados Unidos, país al que viajará antes de regresar a La Habana. La agenda en suelo estadounidense aún está por cerrar, pero Payá confía en verse con varios congresistas y organizaciones para estudiar la "manera" de impulsar la investigación.
Aunque la hija del desaparecido líder del MCL espera "que no fracasen" estas iniciativas, en las cuales se enmarcan también contactos con Amnistía Internacional y Human Rights Watch (HRW), la familia de Oswaldo Payá aún "no descarta" la posibilidad de emprender "acciones legales" en España.
En este sentido, Rosa María Payá ha reiterado la opción de presentar una querella ante la Audiencia Nacional por el "posible asesinato" de su padre, que también contaba con nacionalidad española.
La opositora, firme defensora del Proyecto Varela que promovió su padre y detractora del "cambio fraude" impulsado en los últimos meses por La Habana, confía en volver en un futuro a Europa, toda vez que "hay muchas cosas que se han quedado por hacer". "Si me dejan salir de Cuba, volveré", ha dicho.
CARROMERO
El dirigente de Nuevas Generaciones del PP Ángel Carromero, que conducía el vehículo, fue condenado a cuatro años de cárcel por homicidio imprudente y, en diciembre del año pasado, trasladado a España. Carromero secundó en Cuba la versión del Gobierno de la isla sobre lo ocurrido, pero ya en España cambió su declaración y, en una entrevista con 'The Washington Post', denunció la embestida de un segundo coche.
Rosa María Payá y Carromero se reunieron a mediados de febrero y pusieron en común sus respectivas informaciones, que coinciden en que no se trató de un accidente y sospechan de la implicación de las autoridades del régimen de Raúl Castro. La hija de Payá también se reunió en Estocolmo con el otro superviviente del suceso, Aron Modig, aunque éste insistió en que no recuerda nada.
"Espero volver a ver a Ángel para despedirme", ha explicado, sin entrar a confirmar la posible fecha de este encuentro de última hora. Rosa María Payá ha agradecido a Carromero el "coraje" demostrado al revelar lo ocurrido y ha insistido en que "es una víctima más en todo este proceso y está siendo tratado como culpable".
La hija de Oswaldo Payá ha encontrado apoyo en miembros del PP como el expresidente del Gobierno José María Aznar o la presidenta de los populares madrileños, Esperanza Aguirre, pero las relaciones con el Gobierno en estas últimas semanas han estado marcadas por cierta disparidad.
Así, mientras el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, dio por válida la versión ratificada por Carromero en Cuba, la familia de Oswaldo Payá siempre ha mantenido que el juicio de Bayamo carece de legitimidad. Las dos partes se vieron en marzo y, en un encuentro conciliador, el ministro garantizó la "no interferencia" del Gobierno en las demandas de investigación formuladas por la familia del opositor cubano.
Rosa María Payá ha destacado que se trata de "un paso adelante" en la postura del Ejecutivo de Mariano Rajoy, aunque este compromiso no basta para dar carpetazo al asunto. Será "suficiente", ha añadido, cuando "se realice la investigación internacional" y se esclarezca lo ocurrido.