ROMA, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Papa Benedicto XVI está estudiando "un proyecto concreto" para viajar a Cuba y México en la primavera de 2012, según ha confirmado el portavoz de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi.
Lombardi ha subrayado que el Vaticano ha encargado a los nuncios de estos dos países que "informen a las autoridades religiosas y civiles" sobre esta visita, para que el Papa tome "una decisión final" en breve, a la vista del proyecto que se le presente por parte de las Conferencias Episcopales y de los Gobiernos de ambos países.
Además, el portavoz ha explicado que el Papa ha tenido presente "la esperanza" del pueblo mexicano de que Benedicto XVI visitara el país ya que "los países de América Latina de lengua española deseaban un viaje para ellos", después de la visita del Pontífice a Brasil en 2007.
Lombardi ha destacado que Cuba "es otro país que el Papa deseaba visitar, ya que no ha olvidado el histórico viaje de Juan Pablo II, en el que la Iglesia y todo el pueblo vivieron un periodo importante de su historia". Según ha explicado el portavoz, la visita del Pontífice dará a los cubanos "un gran impulso, en particular en el cuarto centenario del descubrimiento de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre", patrona de la isla.
Asimismo, Lombardi ha recordado que "después de la Conferencia Continental de Aparecida", que reunió a todas las Conferencias Episcopales de Latinoamérica en 2007, la Iglesia en el continente "está comprometida en la misión continental de evangelización" por lo que el Papa "tendrá la oportunidad de animar a toda la Iglesia en esta gran tarea, también durante la preparación del Año de la Fe", que comenzará en el mes de noviembre de 2012.
UN UNICO VIAJE
El portavoz ha precisado que tanto Cuba como México se encuentran "en la misma dirección respecto a Roma" y por tanto ambas visitas se realizarán "en un único viaje", aunque ha subrayado que el Pontífice "no hará muchas etapas" pero sí algunas "con gran valor simbólico y pastoral".
No obstante, Lombardi ha subrayado que las autoridades vaticanas y políticas tendrán que tener en cuenta "la altura" en la que se encuentra principalmente Ciudad del México, por lo que el Vaticano ha "desaconsejado" que el Papa visite la capital por motivos de salud. "Una de las cuestiones que tendrán que ser afrontadas rápidamente será la de ofrecer las mejores alternativas", ha destacado.