Actualizado 17/11/2012 19:30

Cumbre Ib.- Brasil advierte de que una política de austeridad excesiva puede agravar la crisis mundial

Dilma Rouseff
POOL


CÁDIZ, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha advertido hoy en Cádiz de que una política "exagerada" de austeridad aplicada de forma simultánea en todos los países puede "agravar" la crisis mundial y conducir al conjunto de economías a una mayor recesión.

Así se ha pronunciado en la primera sesión plenaria de la XXII Cumbre Iberoamericana que concluirá hoy en Cádiz, donde las intervenciones de diversos líderes --emitidas en abierto a han girado en torno a cuál debería ser la receta adecuada para salir de la crisis, que golpea con especial virulencia a los países del sur de Europa.

"Las políticas que solo enfatizan la austeridad vienen mostrando sus límites", ha subrayado Rousseff, quien ha señalado que a pesar de los esfuerzos para recortar el gasto público, debido al bajo crecimiento el déficit fiscal de muchas economías sigue en aumento.

Aunque los ajustes que se están aplicando en algunos países del sur de Europa han evitado el riesgo de una "quiebra financiera", ha advertido de que no están consiguiendo recuperar la confianza de los mercados ni tampoco la de los ciudadanos en sus instituciones.

Por todo ello, ha abogado por que la contención del gasto público se combine con políticas de estímulo del crecimiento, una tesis en la que coincide el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, quien ha pedido extraer lecciones de las crisis que padeció América Latina en los años 80, de las que se salió combinando austeridad y crecimiento.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, también se ha referido a la crisis que atraviesa Europa, a la que ha aconsejado que no repita "los mismos errores" que su país en 1999 cuando "miles de millones de dinero público se dedicaron al salvamento bancario" en lo que el presidente de Ecuador ha denominado "la mayor confiscación de dinero de la historia del país, empujando a miles de personas a la pobreza, a la exclusión o al exilio".

En ese sentido, ha advertido de que en Europa se "está repitiendo la historia" y de que se están "reduciendo al mínimos" los servicios sociales.

El presidente de República Dominicana, Danilo Medina, ha hecho por su parte una defensa del mantenimiento de la inversión pública social porque lo contrario "conduciría a aumentar la exclusión y a debilitar las economías".