Actualizado 03/12/2010 21:02

Cumbre Ib.- Los líderes iberoamericanos estudiarán adoptar una cláusula democrática para evitar nuevos golpes de Estado


MAR DEL PLATA, 3 Dic. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández) -

Los líderes iberoamericanos que se reúnen a partir de este viernes por la tarde en Mar del Plata (Argentina) estudiarán adoptar una cláusula democrática para prevenir nuevos golpes de Estado en la región, han informado fuentes diplomáticas españolas y de la Secretaría General Iberoamericana.

El texto, propuesto inicialmente por el presidente de Ecuador, Rafael Correa, pretende establecer en qué condiciones se podría suspender de pertenencia a la Comunidad Iberoamericana de Naciones a uno de sus miembros si el resto de socios considera que se ha producido una interrupción de la democracia en ese país y en qué condiciones se permitiría su reingreso.

El documento se ha negociado hasta bien entrada la madrugada de este viernes por los coordinadores nacionales de cada país y llegó a cerrarse un borrador que se elevará esta tarde a los ministros de Exteriores, que podrían ultimar su redacción, y posteriormente a los jefes de Estado y de Gobierno. El documento cerrado anoche contó con el apoyo incluso del representante cubano.

Y es que la cláusula democrática no está pensada para Cuba, la única dictadura de la región, sino para evitar un nuevo golpe de Estado como el de junio de 2009 en Honduras, el único país excluido de la cita de Mar del Plata por la negativa de la mayoría de países sudamericanos a reconocer a Porfirio Lobo como el presidente legítimo de la nación centroamericana.

También se quiere contribuir a prevenir nuevos asonadas como la que sufrió el presidente de Ecuador, Rafael Correa, en septiembre pasado, cuando la Policía se sublevó, tomó la Asamblea Nacional y cercó al presidente en un hospital del que le impedían salir.

Pero el texto que propuso inicialmente Correa ha variado considerablemente. El presidente de Ecuador proponía el establecimiento de "sanciones comerciales y cierre de fronteras en caso de golpe de Estado", en línea similar a la cláusula adoptada recientemente por los 12 miembros de Unasur. Venezuela, Bolivia y Nicaragua eran partidarias de endurecerla incluyendo una referencia de condena contra las "injerencias extracontinentales".

Pero la cláusula democrática que podrá adoptar la Cumbre Iberoamericana ni hablará de sanciones comerciales ni de cierre de fronteras, han confirmado las fuentes consultadas, que subrayan en cambio la relevancia política que adquirirá la Comunidad Iberoamericana de Naciones -que nunca antes había adoptado una medida similar-- y la Secretaría General Iberoamericana con esta decisión, ya que sería el órgano encargado de gestionar la aplicación de la cláusula en caso necesario.

Si los líderes aprueban dotarse de esta cláusula, se incluiría como anexo de la declaración política que se aprobará al término del encuentro.

La Comunidad Iberoamericana de Naciones, de 22 miembros, reúne a los países de habla española y portuguesa de América Latina, más España, Portugal y Andorra. Se reúne a nivel de jefes de Estado y de Gobierno una vez al año desde 1991, cuando se celebró la primera Cumbre Iberoamericana por iniciativa de España y en colaboración con México en el marco de la conmemoración del 500 aniversario del primer viaje de Cristobal Colón a América y con el fin de profundizar la cooperación iberoamericana.