Actualizado 09/11/2007 03:33

Cumbre.- El secretario general iberoamericano anima a los líderes a alcanzar logros concretos para dar credibilidad a la

Bachelet afirma que es tiempo de suscribir un "nuevo pacto social" para legitimar el sistema democrático


SANTIAGO DE CHILE, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -

El secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, animó hoy a los jefes de Estado y de Gobierno de la región que participan en la XVII Cumbre Iberoamericana en Santiago de Chile a concluir esta cita con resultados concretos que puedan ser "percibidos" por los ciudadanos para dar así "credibilidad" a estas citas anuales.

Así se pronunció en la sesión inaugural de la Cumbre, en la que se refirió al convenio de seguridad social que los líderes iberoamericanos prevén adoptar el sábado y que afectará a "más de cinco millones de trabajadores" (entre ellos, más de 600.000 españoles) a quienes se les permitirá sumar el tiempo cotizado en otros países de la región a la hora de calcular su pensión.

Iglesias consideró que "a la mano invisible del mercado hace falta agregarle la mano visible del Estado" para lograr que los beneficios sociales lleguen a la gente, para que sienta que ha logrado "legítimas conquistas". Además, señaló que, en la actualidad, la región presenta condiciones nunca antes logradas históricamente para adoptar medidas concretas a favor de la cohesión social, tema principal de esta cumbre, propuesto por la presidenta Michelle Bachelet.

AGRADECIMIENTO AL REY

El secretario general iberoamericano agradeció por otra parte el "apoyo permanente" del Rey de España al proceso iberoamericano y subrayó que la próxima celebración de los Bicentenarios "será la ocasión para que los iberoamericanos", que consideran el mestizaje como un "activo propio", reconozcan la "libertad y la diversidad" de los pueblos indígenas y afrodescendientes como una "multitud de ventanas abiertas al mundo y que son orgullosamente nuestras".

Por su parte, Bachelet dijo que es tiempo de que los países de Iberoamérica suscriban "un nuevo pacto social entre y dentro de nuestros países", para legitimar el sistemademocrático mediante el otorgamiento de protección e igualdad deoportunidades a sus ciudadanos y ciudadanas.

Recordó que, hace 10 años, el tema de la Cumbre Iberoamericana fue la gobernabilidad y reconoció cuánto se ha avanzado en esta materia. No obstante, señaló que, a pesar de los logros económicos y deestabilidad política, aún persisten "tremendas injusticias que puedenterminar dañando la estabilidad de la democracia".

Bachelet dijo que, en 1980, cuatro de cada 10 latinoamericanos vivían en condiciones de pobreza. "Y a fines de 2006, cuatro de cada 10 ciudadanos siguen viviendo en la pobreza", dijo.

"Esas cifras me impactan", puntualizó, al indicar que "América Latina tiene 205 millones de pobres. De ellos 79 millones viven en la extrema pobreza, de los cuales 50 millones están desprotegidos".

Por ello, la médico socialista hizo un llamamiento a materializar lastareas pendientes en materia de justicia social, "porque no basta conla solidaridad".

Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, saludó que el lema de esta cumbre sea la cohesión social, un reto "importante", ya que, dijo, el compromiso con la paz, el desarrollo y los derechos humanos tiene mucho que ver con unas sociedades más inclusivas.

ASISTENCIAS

De los 22 países que integran la Comunidad Iberoamericana (los de habla española y portuguesa en América y Europa, más Andorra) todos están representados a nivel de jefes de Estado y de Gobierno salvo Cuba, México y República Dominicana. La Habana ha enviado a Santiago al vicepresidente Carlos Lage. El presidente no asiste a estas citas desde que Fidel Castro anunció en la cumbre de Panamá en 2001 un complot para asesinarle.

En el caso de México y República Dominicana, han sido los daños causados por la tormenta Noel en estos países lo que ha obligado a los presidentes Felipe Calderón y Leonel Fernández a cancelar su asistencia a última hora. Les sustituye la ministra mexicana de Exteriores, Patricia Espinosa y el vicepresidente dominicano, Rafael Alburquerque.

Los únicos que aún no llegaron a Santiago, pero se les espera en las próximas horas, son el presidente venezolano, Hugo Chávez, el de Nicaragua, José Daniel Ortega, Honduras, José Manuel Zelaya, Perú, Alan García y Portugal, José Sócrates. No obstante, está previsto que lleguen a tiempo de participar en la primera sesión plenaria prevista para este viernes a las 10.00 horas (16.00 en la España peninsular).