Actualizado 15/12/2015 18:48

Cunha se niega a dimitir y ve "revanchismo" político en la operación contra él

   BRASILIA, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -

   El presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Eduardo Cunha, ha negado que vaya a dimitir del cargo, a pesar de las investigaciones abiertas contra él, y ha catalogado de "revanchismo" la operación llevada a cabo este martes por la Policía Federal.

La Policía ha registrado la vivienda y la oficina de Cunha en Brasilia y en Río de Janeiro, en el marco de una nueva fase de la 'Operación Lava Jato' sobre corrupción que también ha afectado al diputado Aníbal Gomes, al senador Edison Lobao y a los ministros de Turismo y de Ciencia y Tecnología, Henrique Eduardo Alves y Celso Pansera, todos ellos miembros del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB).

   El Consejo de Ética de la Cámara de Diputados ha aceptado --por once votos a nueve-- abrir una investigación contra Cunha para determinar si éste ha violado las normas parlamentarias al tener cuentas en Suiza, lo que podría terminar costándole el cargo.

   Cunha, sin embargo, ya ha adelantado que no dimitirá 'motu proprio' tras una operación en la que ha visto "revanchismo". En declaraciones a los medios ha advertido de que le causa "extrañeza" el amplio despliegue contra miembros del PMDB, socio del Partido de los Trabajadores (PT) de Dilma Rousseff.

   "Fui elegido para que se me investigara, todo el mundo lo sabe", ha apostillado Cunha, que se ha declarado "completamente inocente" y ha sugerido una intencionalidad política vinculada al proceso de 'impeachment' abierto contra Rousseff.

   El Gobierno, por su parte, "espera que todos los hechos investigados en la nueva fase de la 'Operación Lava Jato', que implican a ministros y a otras autoridades, sean esclarecidos lo antes posible y que se establezca la verdad", ha reclamado la Presidencia en un comunicado.