Actualizado 07/08/2009 20:48

Desafiante Berlusconi dice que no tiene por qué disculparse

Por Stephen Brown

ROMA (Reuters/EP) - El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, dijo el viernes que no tiene razones para disculparse tras los escándalos sexuales que lo rodean y sostuvo que no teme chantajes, al tiempo que se jactó de que su apoyo entre los italianos estaba en un nivel récord.

El político de 72 años, cuya reputación se ha visto golpeada por revelaciones explícitas sobre su gusto por las mujeres jóvenes y sus fiestas con prostitutas, llamó a quienes difunden esas historias "antiitalianos que deberían avergonzarse de sí mismos"."

No hubo muestras de arrepentimiento en la rueda de prensa de Berlusconi antes de sus vacaciones para presentar los logros de sus 14 meses en el cargo. El primer ministro no escatimó en elogios por su papel en la escena internacional e incluso llegó a decir que en un momento mostró "un toque de genio".

"Nadie puede chantajearme y no tengo esqueletos en el armario. No tengo nada de lo cual disculparme en mi vida privada, ni siquiera ante mi familia", dijo a periodistas.

La esposa de Berlusconi, Veronica Lario, anunció en mayo que pediría el divorcio por la relación del político con una adolescente de Nápoles, a quien regaló un collar de 6.000 euros por su cumpleaños.

A esa revelación siguieron después historias de acompañantes que pasaron la noche en la casa de Berlusconi y noticias de conversaciones íntimas grabadas en secreto por una mujer, Patrizia D'Addario, a quien se le prometió un escaño en el Parlamento Europeo.

Berlusconi, cuyos flirteos le han costado anteriormente reprimendas públicas de su mujer, niega haber pagado a cambio de sexo.

"ADORO A LAS MUJERES"

Berlusconi ha reconocido que no es "un santo", pero el viernes negó las acusaciones que lo tachan de chovinista, y que se han visto alimentadas por sus bromas sexistas y su preferencia por mujeres jóvenes para puestos políticos, como la ex modelo Mara Carfagna en el cargo de ministra de Igualdad.

"La prensa extranjera ha escrito que odio a las mujeres", dijo. "Si hay una cosa que adoro son las mujeres", añadió.

Afirma que el periódico progresista La Repubblica está orquestando una campaña mediática contra él y, en la rueda de prensa, acusó a la cadena estatal RAI - sobre la que tiene control político - de estar predispuesta en su contra.

Berlusconi, que está en su tercer mandato como primer ministro, es también propietario del mayor grupo mediático privado de Italia, Mediaset.

Sin embargo, mientras que los escándalos causaron reprimendas por parte de la Iglesia Católica y, según algunos sondeos, le costó el apoyo entre los votantes católicos practicantes, las mujeres y los jóvenes, el liderazgo del primer ministro aún parece vivo.

"El apoyo al primer ministro se sitúa en la actualidad en el 68,2 por ciento, lo que es un récord absoluto en las democracias occidentales", dijo Berlusconi, citando sus propias encuestas de opinión.

"Los italianos han mostrado que aprecian el trabajo del primer ministro y su Gobierno y éste es un Gobierno fuerte que durará los próximos cuatro años", sostuvo.

Los últimos sondeos publicados en los medios sitúan el respaldo al primer ministro en un 49 por ciento, con opiniones favorables por su decisiva respuesta al terremoto de abril en Abruzzo.

Su partido de centroderecha logró victorias claras en las elecciones locales y europeas de junio y el Gobierno, con una sólida mayoría parlamentaria, continúa aprobando leyes frente a una débil oposición de centroizquierda.