PESHAWAR, 26 Sep. (Reuters/EP) -
Al menos 16 personas han muerto y 71 han resultado heridas por la explosión de dos vehículos bomba en Pakistán, según informaron este sábado las autoridades.
El atentado más sangriento tuvo lugar en Peshawar, la ciudad más importante del noroeste del país. Allí, un terrorista suicida arrojó una granada a los transeúntes que paseaban delante de un aparcamiento en las inmediaciones de un hospital militar antes de proceder a detonar los cien kilos de explosivos que transportaba el coche bomba que conducía.
La explosión causó la muerte a diez personas y ha provocado heridas a otras 71, cinco de ellas en estado crítico. Los daños materiales han sido enormes: la fachada del hospital se ha colapsado y al menos una docena de vehículos han resultado completamente destruidos, según el administrador Sahibzada Anis.
La Policía ha informado de que ha detenido ya a dos sospechosos que se encontraban en la escena del atentado, que sucedió sólo horas después de la explosión de un camión bomba frente a una comisaría de Policía la localidad de Bannu (provincia Frontera Noroeste), y que causó la muerte de seis personas y dejó heridas a otra treintena, seis de ellas agentes de seguridad.
El portavoz talibán, Qari Husain, un comandante talibán que entrena a futuros suicidas, confirmó la autoría de este último atentado vía telefónica a Reuters y advirtió de que habrá más ataques. "El Gobierno estaba tomando una ventaja excesiva de nuestro silencio", afirmó. "Perpetraremos más ataques de este tipo y serán mucho más poderosos", añadió.
Husain se identificó como portavoz del flamante jefe de los talibán de Pakistán, Hakimulá Mehsud, que ha sucedido a Baitulá Mehsud tras su muerte en un ataque aéreo el pasado mes de agosto. De esta forma, Hakimulá a pasado a encabezar la facción Tehrik-e-Taliban, que agrupa a su vez a 13 grupos milicianos apostados principalmente en la zona noroeste de Pakistán, cerca de la frontera con Afganistán.