QUITO, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, advirtió hoy que la decisión del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de enviar al Congreso Nacional la solicitud de realizar una consulta popular "no tiene validez alguna" y aseguró que es el organismo electoral el que "tiene que responder" si se convoca o no a referendum.
El TSE --por decisión de los miembros opositores al Gobierno-- envió ayer al Parlamento el documento que entregó recientemente Correa en el que pedía formalmente que se convoque a una consulta popular el próximo 17 de marzo en la que se preguntará a la ciudadanía si respalda la idea de instalar una Asamblea Nacional Constituyente. Los vocales del organismo piden a los diputados que definan si es constitucional la propuesta del presidente ecuatoriano.
A este respecto, Correa aclaró que le tiene "sin cuidado esa resolución" porque para el Gobierno la respuesta que tendrá validez es la que emita la institución electoral. "Para nosotros la consulta sigue en el TSE. Si estos señores la mandan a la Comisión Jurídica del propio Tribunal, al Congreso, lo mandan a Estados Unidos o a la China es problema de ellos, porque de acuerdo con la Constitución nos tienen que responder la orden que les dimos", declaró a la prensa.
En este sentido, advirtió que está a la espera de que se cumplan los plazos legales que tiene el TSE para tramitar la consulta, de lo contrario, la consulta será aprobada bajo el mecanismo que denominó "silencio administrativo".
La entrega de la propuesta al Congreso Nacional ocurrió ayer en medio de un clima de manifestaciones promovidas por simpatizantes del partido de Gobierno, Alianza País, quienes tomaron la sede del TSE para exigir una respuesta a la solicitud del mandatario ecuatoriano de llamar a una consulta para instalar una Constituyente que se encargue de reformar la Carta Magna.
Correa calificó este hecho como una "pacto de la mayoría de la partidocracia" al referirse a la decisión que tomaron los partidos de la oposición que son mayoría en el TSE con la que pretenden invalidar la propuesta del oficialismo en el parlamento donde también cuenta con gran apoyo político.
El presidente ecuatoriano propone reformar la Constitución a través de una asamblea de 130 miembros elegidos por voto popular que tendrán un lapso de 6 meses para hacer las modificaciones legales que diferentes sectores de la sociedad propongan.