Actualizado 17/12/2013 21:30

Demócratas y republicanos acuerdan pago retroactivo a 800.000 empleados

Trabajador federal de EEUU en el Capitolio
Foto: REUTERS

WASHINGTON, 6 Oct. (Reuters/EP) -

   Demócratas y republicanos en la Cámara de Representantes acordaron este sábado pagar en retroactivo a 800.000 empleados públicos una vez que termine la paralización del Gobierno, aunque aún no se avista un fin a la medida que entró en su quinto día.

   Además, el Pentágono dijo este sábado que la mayoría de sus 400.000 empleados civiles volverán a trabajar, una medida que podría aliviar el impacto de la paralización sobre las fuerzas armadas.

   La Cámara de Representantes, liderada por republicanos, aprobó de manera unánime el proyecto de ley y ahora se espera la del Senado y que el presidente Barack Obama la convierta en ley.

   Fue un inusual momento de cooperación en la Cámara, ya que ambos partidos defienden con firmeza sus posiciones sobre la paralización de la administración federal en Estados Unidos.

   El estancamiento, que comenzó al inicio del nuevo año fiscal el jueves y que paralizó casi por completo las operaciones esenciales del Gobierno, es el último de una serie de confrontaciones sobre el presupuesto entre Obama y los republicanos en el Congreso.

   En tanto, el secretario de Defensa, Chuck Hagel, dijo que una revisión legal de una ley firmada el lunes por el presidente le permitía convocar a trabajar a un número no especificado de empleados la próxima semana.

   Afuera del Congreso, donde se reunían el sábado los legisladores, dos pequeños niños sentados en la escalera del Capitolio portaban carteles en los que se leía 'Terminen la paralización' y 'Dejen de actuar como niños'.

   La actual postura de los republicanos apunta a desbaratar la reforma de salud del presidente Obama, conocida como 'Obamacare', que expandirá la cobertura de salud a millones de personas sin seguro médico.

   Los republicanos se han negado a aprobar un proyecto de ley de financiación sin incluir medidas que debilitarían el Obamacare.

   La líder de los demócratas en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, envió una carta al presidente de la cámara, el republicano John Boehner, demandando una votación para poner fin a la paralización y dijo que si los republicanos accedían, entonces su partido acordaría el nivel de financiamiento del Gobierno para las próximas seis semanas pedido por los republicanos.

   El secretario de prensa de Boehner, Michael Steel, descartó la oferta de Pelosi diciendo que "en este momento, son los demócratas del Senado y el presidente quienes están bloqueando el progreso para reabrir el Gobierno".

MEDIDAS EXTRAORDINARIAS

   En una entrevista con la agencia de noticias Associated Press difundida el sábado, Obama dijo que no espera tener que recurrir a medidas extraordinarias para evitar que Estados Unidos enfrente una cesación de pagos, porque cree que el Congreso elevará el límite de la deuda antes de la fecha límite del 17 de octubre.

   "No espero llegar a eso", dijo Obama en una entrevista con la agencia de noticias Associated Press que fue difundida el sábado. "Hubo al menos algunas citas ayer de que el presidente John Boehner está dispuesto a asegurarse que no enfrentemos un incumplimiento de pagos", agregó.

   "Y estoy bastante dispuesto a apostar que hay suficientes votos en la Cámara de Representantes ahora para asegurar que Estados Unidos no termine siendo un holgazán", agregó.

   En su discurso semanal por radio, Obama dijo que la paralización del Gobierno de Estados Unidos está teniendo un impacto "desgarrador" en los ciudadanos y renovó el sábado un llamamiento a los republicanos en el Congreso para "acabar la farsa" y aprobar un proyecto de ley de financiación sin condiciones.

INCERTIDUMBRE CONTINÚA

   Los líderes demócratas de la Cámara estaban considerando el viernes usar una maniobra que podría forzar una votación para reanudar las operaciones del Gobierno de inmediato.

   El plan se refiere a una inusual "petición" que desplaza un proyecto de ley desde una comisión y lo envía al pleno del cuerpo si 218 legisladores de los 435 firman la petición.

   La medida tomaría alrededor de una semana en superar obstáculos de procedimiento en la Cámara, según el representante demócrata George Miller.

   Una votación en la Cámara no se llevaría a cabo hasta al menos el 14 de octubre, que es un feriado federal, agregó el legislador.

   Mientras tanto, la paralización está afectando a la economía a lo largo del país, desde compañías que lidian con contratos gubernamentales hasta parques nacionales que normalmente generan millones de dólares diarios en ingresos por turismo.

   Los republicanos también están buscando concesiones a cambio de elevar el límite de endeudamiento del país de 16,7 billones de dólares. Si no se eleva el techo de la deuda, Estados Unidos entrará en un incumplimiento de deuda, lo que, según funcionarios y economistas, tendría consecuencias graves para el país y las economías globales.

   Tras la votación sobre el pago retroactivo, el republicano Kevin McCarthy dijo que su partido estaba dispuesto a negociar con Obama y los demócratas. "El presidente está aquí este fin de semana, nosotros estamos aquí este fin de semana. Ahora es el momento, ya que todos estamos aquí, de levantar el teléfono y hablar", afirmó.

   Scott Rigell, representante republicano por Virginia quien pidió una votación "limpia" para financiar al Gobierno que no involucre la ley de salud, dijo que por lo que sabía no había negociaciones entre ambos bandos sobre la paralización o el techo de endeudamiento. "Nadie está hablando", dijo Rigell a Reuters.