Actualizado 27/01/2012 07:15

EEUU.- HRW advierte del número creciente de ancianos en las cárceles de EEUU

NUEVA YORK, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

La ONG Human Rights Watch (HRW) ha denunciado que el número de ancianos en las cárceles de Estados Unidos se ha multiplicado por 94 entre 2007 y 2010 respecto al número total de encarcelados en las prisiones del país, lo que aumenta la presión para los funcionarios de centros penitenciarios de mejorar los servicios sanitarios en estos complejos.

Según HRW, los prisioneros de la tercera edad suponen un gasto de tres a nueve veces superior debido a sus necesidades médicas. El número total de prisioneros de más de 55 años aumentó en seis veces la cifra del total de prisioneros entre 1995 y 2010.

"Las cárceles no están diseñadas para ser instalaciones geriátricas", explicó Jamie Fellner, asesor en Estados Unidos para HRW. "Los funcionarios de prisiones atienden a ancianos en las cárceles", señaló.

En un comunicado, la organización denunció que "las largas sentencias suponen que mucho encarcelados no abandonarán la cárcel hasta que sean muy mayores". El 9,6 por ciento de los prisioneros actualmente en las cárceles de Estados Unidos cumple cadena perpetua y otro 11,2 por ciento debe estar en la cárcel durante más de veinte años.

La organización denunció que los funcionarios que trabajan en centros penitenciarios deben atender las necesidades de los prisioneros de mayor edad, aunque no pueden desarrollar bien estas labores debido a los presupuestos limitados, las barreras arquitectónicas dentro de las prisiones y la falta de instalaciones y personal sanitario, así como del apoyo de los políticos.

"Cumplir un tiempo en prisión es duro para cualquiera, pero es particularmente difícil para el creciente número de ancianos encarcelados que son frágiles, tienen problemas de movilidad, audición y visión y sufren enfermedades crónicas o terminales o tienen disminuidas las capacidades cognitivas", denunció el comunicado.

La organización señaló que muchos funcionarios han tenido que adaptar su trabajo al creciente número de reos de edad avanzada. "El personal de prisiones que trabaja con ancianos sabe que no tiene sentido gritar a un prisionero que no sabe lo qué le estás diciendo", comentó Fellner. "Como me dijo un sargento, los funcionarios han tenido que dar a los ancianos 'mayor libertad de movimiento' a la hora de aplicar las normas", indicó.

EL NÚMERO DE ANCIANOS EN CÁRCELES AUMENTARÁ

HRW señaló que el número de ancianos en las cárceles seguirá creciendo si se siguen aplicando políticas de "mano dura contra el crimen", como el aumento de cadenas perpetuas y la reducción de oportunidades para pedir la libertad condicional. Muchos prisioneros permanecen encarcelados a pesar de que son demasiados mayores o están muy enfermos como para amenazar la seguridad pública.

"¿Cómo está preparada la justicia y la seguridad pública para la encarcelación continua de hombres y mujeres cuyos cuerpos y mentes se han ido deteriorando con la edad", preguntó Fellner.

La organización pidió que el Gobierno nacional y las administraciones federales revisen las sentencias y las políticas sobre encarcelamientos para determinar como se puede reducir el número de ancianos en las cárceles sin afectar a la seguridad pública, desarrollar planes completos de atención sanitaria y se modifiquen las normas internas de las prisiones para no tomar acciones represivas contra los ancianos.