QUITO, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
El joven Jaime Palate, hermano de Carlos Alonso Palate -uno de los dos ecuatorianos que murieron en el atentado perpetrado por ETA el pasado 30 de diciembre en el aeropuerto de Barajas- viajará a finales de mes a España para representar a su familia en la recepción de la ayuda ofrecida por el Gobierno español.
"Se habla de visados, de la entrega de apoyo económico para la familia. Todavía no sabemos exactamente. Lo que me interesa es que ayuden a mi mamá", expresó Jaime Palate un día después de que los restos mortales de su hermano fueran enterrados en el cementerio de Picaihua, el pueblo que le había visto nacer hacía 35 años.
El Gobierno español ha anunciado su intención de conceder un total de 240.000 euros de indemnización a los familiares directos de Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio, así como la concesión a título póstumo de la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a la víctimas del terrorismo.
"Nunca se olvidó de nosotros, cada mes nos enviaba alrededor de 300 euros y con eso pagábamos luz, agua, comida e incluso ahorramos para mejorar la casita", recuerda entre sollozos Geovany Palate, de 22 años, una de las hermanas de Carlos Alonso que sufre de ataques epilépticos, informa la prensa local, recogida por Europa Presss.
Los habitantes de Picaihua, que hasta hace unos días desconocían la existencia de ETA, reflejaron este fin de semana su repudio a los atentados y exhibieron carteles de rechazo durante los funerales y el entierro de Carlos Alonso, a los que asistieron cientos de familiares y amigas de la víctima.
"Queremos que el mundo entienda que somos gente pacífica, que tenemos que dejar nuestra tierra y a nuestras familias por la pobreza en que vivimos para mejorar la situación económica. Por eso queremos que el terrorismo se acabe en el mundo, porque mata a personas inocentes", afirmó Lilián Lascano, vecina de Picaihua.