Sus compañeros, que jugarán este sábado su primer partido sin él, confían en que "tarde o temprano" los etarras paguen por su muerte
MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los jugadores del equipo de fútbol de Diego Armando Estacio, uno de los dos jóvenes ecuatorianos que murieron en el atentado de ETA en Barajas, confirmaron hoy que "todo el equipo" acudirá este sábado a la manifestación "para apoyar" a toda la gente que quiera sumarse al recuerdo de su compañero y para respaldar "al pueblo español en lo que sea", ya que los terroristas han demostrado ser "unos asesinos".
Ante el hecho de que su amigo haya sido víctima de un atentado terrorista, el capitán del equipo, Diego Sevilla, confesó en declaraciones a Europa Press Televisión que al venir de un país en el que el terrorismo no existe, le cuesta asimilarlo. "Vienes acá a España y asimilas lo que es ETA pero no lo tomas en serio, ahora con lo que ha pasado realmente te das cuenta del problema social que tiene España", lamenta.
Todos los martes y los jueves, sin falta, el Gran América se reúne en torno al balón para realizar sus entrenamientos aunque desde lo ocurrido suspendieron todos sus partidos. Mañana faltará un medio centro, Diego, "quien siempre tenía una palabra de ánimo para todos". Ahora, el equipo entero, echando la vista atrás desde el presente, sabe que "el número doce va a hacer mucha mucha falta".
"Diego era una persona humilde, sencilla, trabajadora y respetable". "Era uno de los más arreglados del equipo y se siente el hueco que hay, se nota que era el alma, una de los armadores del mediocampo; pero hay que intentar superarlo y seguir adelante", explica su capitán.
El deporte le apasionaba, como al resto de sus compañeros, y por este motivo, sus compañeros intentarán homenajearle en su primer partido mañana. En el próximo campeonato que dispute el Gran América incluirán en las nuevas equipaciones "una dedicatoria para Diego".
Preguntado por cómo vivieron el momento del atentado, Sevilla confiesa que fue "una angustia". "Nosotros nos enteramos el martes por las noticias, al principio no sabíamos quien era, sólo sabíamos que era un latino pero no sabíamos que era un amigo nuestro; y desde el martes hemos estado todas las noches asistiendo con Verónica, ahí todos preocupados y todos con una esperanza", recuerda.
Pero la esperanza se truncó cuando el cuerpo de Estacio apareció el viernes pasado entre los escombros del aparcamiento. "El equipo bajó en general --a reunirse con los familiares de la víctima-- y nos quedamos ahí hasta lo último", afirma.
Ahora, cuando ya ha pasado más de una semana, Sevilla sigue recordando a la persona que perdieron. "Cada vez que te acuerdas de él, de no haberle dicho todo lo que se le apreciaba, en general te queda un sentimiento y todavía no asimilas las cosas porque no crees, porque la semana pasada estabas jugando al fútbol con él y ahora de la noche a la mañana ya no le tienes", lamenta.
"ERA UNA BUENA PERSONA"
Esteban, otro jugador, explica que a Diego lo conocía desde hace cinco meses, tiempo suficiente para saber que "fue una muy buena persona". "Era muy cumplido, si hacía una cosa lo hacía muy bien, amable con la gente, era una persona que se sabía ganar el cariño de los demás y, por supuesto, se ganó el de nosotros y es duro jugar ahora sin él, saber que con él estuviste jugando un tiempo y compartiste vestuario y compartiste otros momentos porque a parte del futbol también salíamos", añade.
Por su parte, otro de los componentes, Daniel recuerda que 'el Bombero', como le conocían en el equipo, "siempre ha sido un chico muy sincero que así llueva, nieve o haga mucho calor, si tenían que quedar siempre quedaba, siempre estaba pendiente de que nada faltara".
"Era bien amigable, era muy chistoso también, si se le pedía un favor él te lo hacía encantado, aunque no te conociera; yo siempre lo llevaré igual, presente, y más en la cancha que siempre estaba con él todos los martes y jueves", afirma.
"EN ESTA VIDA TODO SE PAGA"
Otro de los jugadores del Gran América, Eduardo, asegura que en él "se mostraba lo grande que puede llegar a ser una persona, lo sencilla y humilde que puede llegar a ser". Preguntado por cómo asimiló el atentado en su momento, reconoció que al principio le dio "rabia", pero "poco a poco" se dio cuenta de que "con rabia no se pueden solucionar las cosas". "Pero en esta vida se paga todo, y tarde o temprano lo pagarán porque con la misma vara que mides serás medido", concluyó.