Publicado 02/07/2015 22:11

Esteban Quispe, la joven promesa boliviana de la robótica

Esteban Quispe
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   LA PAZ, 2 Jul. (Notimérica) -

   A sus 16 años, el joven boliviano Esteban Quispe es toda una promesa de la robótica.

   Este estudiante residente en el municipio de Patacamaya, fabrica robots utilizando objetos que rescata de la basura, ya que sus recursos económicos son limitados.

   El interés por la tecnología surgió en Esteban, tal y como explicó al medio boliviano 'La Razón', a la temprana edad de diez años, cuando fabricó junto a su padre, Martín Quispe, un coche de madera al que le instaló un par de focos que funcionaban gracias a un interruptor.

   Los padres, un albañil de oficio y una ama de casa, Teresa Churata, le explicaron a dicho diario que Esteban siempre fue un niño muy mañoso. Desde bien pequeño, el joven hacía artesanías con alambre de cobre para, posteriormente, venderlas. Con el dinero obtenido, podía comprar libros y demás material escolar, ya que la familia no podía permitirse los gastos del colegio.

   En su casa, Esteban tiene un cuarto al que llama su "laboratorio", donde guarda cuidadosamente sus inventos. El primero de todos fue u cartón plegado con un circuito de luces que parpadean de derecha a izquierda, imitando a la iluminación del televisivo 'Coche Fantástico'.

   El pasado 2014, el joven decidió mostrar su talento en una feria de su municipio, obteniendo la admiración de todos sus vecinos, quienes lo elogiaron como el "futuro" de Patacamaya. Ante esto, sus padres decidieron hacer un gran esfuerzo económico y comprarle un ordenador portátil.

   A pesar de que Esteban carecía de conocimientos informáticos, en poco tiempo logró hackear su ordenador para que éste le respondiera a ciertos saludos y preguntas con sólo hablar.

   Su último y más sorprendente invento es un robot llamado Wall-Ekitt. Este aparato, similar al personaje de Disney Wall-E, es capaz de mover sus brazos, trasladarse de un lado a otro y detectar y evitar obstáculos. Según explicó el Esteban a 'La Razón', ahora estaba "trabajando en una forma de controlarlo" desde su teléfono móvil.

   Es con su última creación con la que competirá en la Olimpiada Científica Estudiantil, en la categoría de robótica, del Ministerio de Educación de Bolivia, que tendrá lugar este julio.

   La principal meta de esta joven promesa es crear inteligencia artificial. Más concretamente, lo que más desea es poder construir un robot que acompañe y ayude a su padre, que sufre dolores de espalda.

   Esteban, que terminará este curso sus estudios de secundaria, considera que los androides pueden facilitar el trabajo de los productores de la tierra, para que éstos dejen de migrar a las ciudades y tengan una mejor calidad de vida.

   Por el momento, el llamado genio de Patacamaya parece estar bien encaminado para lograr sus sueños. De hecho, este miércoles, el director general de Ciencias y Tecnología del Ministerio de Educación de Bolivia, Roberto Sánchez, le entregó una beca de estudios universitarios debido a su esfuerzo y dedicación a la invención de la robótica.

   Gracias a esta beca, Esteban podrá cursar los estudios que desee en la universidad que él elija.