Actualizado 06/08/2009 21:55

Evo Morales retorna emotivamente a capital boliviana

Por Diego Oré

SUCRE, Bolivia (Reuters/EP) - El presidente Evo Morales retornó el jueves a la capital constitucional de Bolivia, tras dos años de duros choques con líderes regionales, con un llamado a la unidad y asegurando estar listo para enfrentar en diciembre una candidatura única de la oposición.

Entre vítores y críticas, seguidores y opositores del mandatario cruzaron consignas durante un desfile cívico-militar que siguió a un discurso en el Congreso en la sureña ciudad de Sucre por el aniversario de la independencia de Bolivia, pero no hubo enfrentamientos ni hechos de violencia como se temía.

Gritos como "Evo asesino" o "Sucre se respeta carajo" caldearon los ánimos durante el desfile, en el que pobladores de la capital boliviana y trabajadores de sus instituciones públicas vitorearon a las principales autoridades de la oposición conservadora.

Paralelamente, cientos de campesinos llegados de las afueras de la ciudad y de regiones mineras apoyaron a Morales con consignas como "Evo amigo, Sucre está contigo", que se sobrepusieron a las marchas militares que acompañaron el desfile en el que fuera uno de los bastiones de su primera victoria electoral en el 2005.

Morales, quien buscará la reelección el 6 de diciembre, llamó a la unidad en un discurso de menos de una hora, que marcó el acto central de celebración de los 184 años de la independencia, en medio de fuertes medidas de seguridad.

"Lo mejor que podemos hacer de homenaje a esta Patria es todos unirnos, juntarnos y pensar igual por los bolivianos y bolivianas (...), aunque siempre habrá diferencias", dijo un emocionado Morales, prometiendo profundizar los cambios que impulsa para estatizar la economía y "empoderar" a las mayorías indígenas.

Las opositoras prefecta y alcaldesa de Sucre, pese a advertir que no irían, finalmente sí estuvieron en la sesión del Congreso en señal de acercamiento a Morales.

Sin embargo, tras el mensaje, ocuparon el balcón de la Prefectura y desde allí animaron a la multitud congregada en la plaza principal a gritar vivas en contra de Morales que observaba desde la contigua Casa de la Libertad.

DESAFIO OPOSITOR

A cuatro meses de los comicios de diciembre, Morales llamó a la oposición a trabajar en propuestas políticas en vez de buscar la desestabilización del "proceso de cambio", del cual aseguró que "no tiene marcha atrás".

"En el 2007 y 2008 los opositores hicieron algo, no pudieron", rememoró, en referencia a un referendo revocatorio del que salió airoso y a un "golpe cívico militar" que tampoco prosperó pero dejó un tendal de muertos y millonarias pérdidas económicas.

"Intentaron un golpe de Estado, tocaron las puertas de los cuarteles (...), lo que está pasando ahora en Honduras tenía que pasar el año pasado (en Bolivia)", agregó, remarcando que pese a esto Bolivia aprobó este año la nueva Constitución que permite de la reelección presidencial inmediata.

"Fracasaron y estoy seguro que seguirán fracasando (...), pero escuché que todos (los opositores) se van a unir en base a una mujer, mejor todavía es medirnos en las urnas y que no piensen en dividir ni en matar a Bolivia", agregó desafiante.

Morales, un aliado del venezolano Hugo Chávez y del ecuatoriano Rafael Correa, se refería a la analista política Jimena Costa quien dijo esta semana que fue invitada por sectores opositores a encabezar una candidatura única contra el mandatario.

Las celebraciones culminarán el viernes con una parada militar-indígena en la ciudad altiplánica de Oruro.