Actualizado 26/07/2012 07:41

Las FARC se comprometen a abandonar Cauca tras la Fuerza Pública

Soldados colombianos patrullando en Cauca
Reuters


BOGOTÁ, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

El líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverry, alias 'Timochenko', ha emitido este miércoles un comunicado en el que la guerrilla se compromete a abandonar el departamento de Cauca, ubicado en el suroeste del país, tras la Fuerza Pública, y a liberar a los dos pilotos que fueron secuestrados el pasado 10 de julio.

En la primera parte del comunicado, el líder guerrillero ha contestado a la carta que la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte de Cauca (ACIN) envió el pasado 17 de julio a las FARC para solicitar la retirada de sus combatientes del departamento. Las comunidades nativas acusaron al grupo armado de atacar a la población civil y de "no respetar su autoridad y su justicia".

"Si el Ejército, la Policía y los paramilitares salen de Cauca, si termina su guerra contra los indígenas, los campesinos, los mineros y pueblo en general, nosotros no tendremos problemas para salir también", ha anunciado 'Timochenko' en la misiva, reproducida por Caracol Radio.

El jefe de las FARC ha considerado que "es natural que el pueblo que sufre la guerra civil la rechace con ahínco", dado que "no ha sido una decisión del pueblo colombiano, sino una imposición de las clases pudientes y dominantes".

En este sentido, ha recordado que "si en Colombia cesaran las operaciones militares, los bombardeos y los ametrallamientos, los desplazamientos forzados, el despojo de la tierra, los crímenes contra el pueblo y la impunidad, con toda seguridad, no tendría sentido la existencia de las guerrillas".

A pesar de la oferta de las FARC, es difícil que llegue a materializarse ya que el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, ha reiterado en numerosas ocasiones que no desmilitarizará "ni un centímetro del territorio nacional", argumentando que ello permitiría el avance de la guerrilla, por lo que la Fuerza Pública seguirá presente en Cauca.

Desde hace dos semanas, las FARC y la Fuerza Pública se enfrentan en Cauca, después de que la guerrilla lanzara una de sus peores ofensivas contra el departamento. Los indígenas han intervenido, pidiendo a ambas partes que cesen las hostilidades y abandonen la región.

El conflicto se agravó la semana pasada, cuando los indígenas del municipio de Toribío, el mas afectado por la violencia, comenzaron a desmantelar las bases del Ejército y de la Policía y desalojaron a los efectivos por la fuerza.

De momento, los enfrentamientos se han saldado con un total de cinco muertos --dos por parte de los indígenas y tres por parte de la Fuerza Pública-- y 3.000 desplazados por la violencia solo en Toribío.

PRÓXIMA LIBERACIÓN

Por otra parte, 'Timochenko' ha anunciado que la guerrilla está dispuesta a liberar a los pilotos de helicóptero Carlos Álvarez y Alejandro de Jesús, que fueron secuestrados el pasado 10 de julio en el municipio de Argelia, en Cauca.

Como condición, el grupo armado ha exigido la mediación del Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) y de la Red de Derechos Humanos Isaías Cifuentes, apuntando que las fechas y el lugar de la liberación serán entregados a los mediadores.

Además, las FARC han explicado que secuestraron a Álvarez y a De Jesús, que trabajan para una empresa privada, porque les confundieron con militares, ya que "su helicóptero llevaba cerca de dos meses sobrevolando intensamente la zona".

El pasado mes de febrero, la guerrilla anunció la liberación de un grupo de diez policías y soldados que, en algunos casos, llevaban trece años de cautiverio y un mes después cumplió su palabra entregándolos a las autoridades, con la mediación de una misión humanitaria formada por el CICR y Colombianos y Colombianas por la Paz (CCP).

Las FARC han llegado a tener en su poder a decenas de uniformados, a los que pretendía cambiar por guerrilleros presos en las cárceles colombianas como parte de su estrategia política, y al mismo tiempo ha tenido secuestrados a civiles, a los que utilizaba con fines económicos. El Gobierno nunca ha accedido a estas propuestas, por lo que policías y soldados han tenido que ser entregados de forma unilateral o rescatados en operativos militares.

Según datos de la Fundación País Libre, la guerrilla de mantiene en su poder a 405 civiles, sin que hasta la fecha se hayan presentado pruebas de vida de muchos de ellos.