Actualizado 17/07/2009 22:31

Gobierno Nigeria dice algunos rebeldes comienzan a deponer armas

Por Randy Fabi

ABUYA (Reuters/EP) - Algunos rebeldes en Nigeria han comenzado a deponer sus armas y cientos más están a punto de seguirlos, pero el principal grupo militante aún debe asumir una postura sobre una oferta de amnistía, dijo el viernes un alto funcionario del Gobierno.

Lucky Ararile, coordinador jefe para asuntos de amnistía del Gobierno, dijo que al menos 350 militantes expresaron su interés en acogerse al ofrecimiento del presidente Umaru Yar'Adua, una medida dirigida al desarme, rehabilitación e integración de hombres armados a la sociedad.

"Unos pocos renunciaron a sus armas en el estado de Akwa Ibom, Rivers y Warri", precisó Ararile a periodistas.

"Estamos en contacto con grupos que están listos para rendirse y los grupos afirman tener cerca de 350 personas", agregó.

Estos hombres no son miembros del Movimiento por la Emancipación del Delta del Níger (MEND), que comenzó una campaña de ataques en el 2006 en el país de mayor producción petrolera de Africa.

Para que el programa de amnistía sea exitoso, analistas explican que los combatientes de MEND deben formar parte de él y apoyarlo públicamente.

El mercado de crudo ha tomado una actitud de espera debido a las extendidas dudas sobre si el programa hará lo suficiente para detener los ataques de MEND.

El grupo militante declaró un cese al fuego de 60 días el miércoles tras la liberación del líder rebelde Henry Okah, el primer insurgente de alto perfil en aceptar la oferta de amnistía.

Además, comentó que está abierto a hablar con el principal negociador del Gobierno, Timi Alaibe.

Los hombres que acepten la amnistía recibirían un estipendio de 65.000 nairas (444 dólares) mensuales para costos de vida y alimentos durante un programa de rehabilitación , precisó Ararile.

El costo total del programa fue estimado en menos de 15.000 millones de nairas y el Gobierno está buscando un mayor apoyo financiero de parte de las compañías petroleras, las cuales también se verían beneficiadas por la amnistía a causa de los ataques de hombres armados a sus instalaciones.