Actualizado 06/02/2008 21:05

Guatemala.- Nuevas víctimas del genocidio narran ante el juez Pedraz cómo el Ejército asesinó a mujeres embarazadas

El juez instruye esta investigación en la A.Nacional en virtud de la jurisdicción universal correspondiente a delitos de lesa humanidad


MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

Dos nuevos testigos protegidos declararon hoy ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz en torno a la investigación sobre el genocidio maya en Guatemala --que provocó entre 1978 y 1984 más de 250.000 víctimas, de las que más de 45.000 siguen hoy desaparecidas-- y relataron como el ejército guatemalteco "arrasó" sus aldeas, "quemando las casas con familias dentro" y "asesinó a mujeres embarazadas a las que llegaron a extraer el feto después de matarlas".

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 instruye este caso en virtud de la jurisdicción universal correspondiente a los delitos de lesa humanidad y tiene previsto interrogar también entre el 3 y 7 de marzo y el 5 y 9 de mayo a otras víctimas del genocidio, familiares de los asesinados y personas que tuvieron alguna relación con estos hechos. Ya durante esta semana, el magistrado ha escuchado un total de seis testimonios que han narrado diversas atrocidades.

El primer testigo protegido que declaró hoy, recordó que la gente de su aldea, en la que "había 150 familias", se asustó cuando vio llegar por primera vez a la guerrilla en 1980. "Yo en aquel momento era comerciante y vendía artículos a otras aldeas por lo que conocía bien las montañas", detalló al magistrado ante el que relató que en 1981 se enteró de una masacre acaecida a manos del Ejército en una localidad cercana. "Los supervivientes me dijeron que mataron a unas setenta personas", puntualizó.

"Fue entonces cuando decidimos establecer medidas de vigilancia en la aldea", explicó el testigo, quien detalló como en una de las guardias vio a "dos pelotones de soldados entrar en una de las casas y masacrar a los miembros de una familia". "Llevaban machetes y armas largas, cerraron la casa y la quemaron con la familia dentro. A los muertos los enterramos como pudimos, a la carrera", dijo.

"PUDE VERLO TODO".

Según los relatos del testigo, era de este modo como se desarrollaban las incursiones del Ejército en las aldeas, donde la quema de casas era habitual, así como el asesinato de mujeres, incluso embarazadas. "A una de las señoras, que estaba embarazada, le abrieron el estómago y sacaron el feto, primero la mataron a ella y después al feto, al haber estado en vigilancia pude verlo todo", narró.

"En aquella ocasión --prosiguió-- la única casa que dejaron fue la del comisionado Militar al que fueron para reprocharle que no les hubiera avisado de que por la aldea había pasado la guerrilla, este aseguró que no había pasado nadie y una semana después le mataron por ello".

Asimismo, recordó otro suceso en el que las tropas del Ejército bombardearon a un nutrido grupo de campesinos que huía de sus ataques por las montañas. "Bombardearon a mujeres, ancianos y niños, todos desarmados, se escondían debajo de las piedras para que no les matasen", dijo.

Escapando, hacía lugares más seguros, añadió que "los niños no podían ni andar y morían en el camino, los teníamos que enterrar ahí mismo, otros cargaban con ellos muertos para enterrarlos al llegar a la aldea". "El ejercitó nos decía que ya había perdón, democracia y amnistía, pero escuchábamos la radio intercontinental y las masacres seguían", añadió.

En el plano personal, indicó como a él mismo le acusaron de guerrillero y le torturaron por ello. "Luego me llevaron para que les dijera dónde estaba escondida la gente, pasé días sin comer, me acuchillaron en el estómago y me colgaron como ejemplo de lo que le podía pasar a los guerrilleros", explicó el testigo que enfatizó como, después de tenerle "en un cuarto con las paredes cubiertas de sangre" y sin darle de comer, le sometieron a "interrogatorios continuos".

SEGUNDO TESTIMONIO.

Por su parte, el segundo de los testigos protegidos que prestó declaración hoy ante el juez, de nombre Pedro, se refirió en varias ocasiones a las tropas guatemaltecas como "el ejército de los ricos" y recordó como "sus mandos intimidaban y amenazaban a la gente, quitándoles las parcelas".

"El ejército capturó a varias personas que al cabo de 15 o 20 días aparecieron muertos, tirados en caminos y montañas y otros no aparecieron nunca", comenzó criticando Pedro, quien, sin embargo, también tuvo palabras de denuncia para las actividades de la guerrilla en la que, según explicó, "se integraron personas con una fuerte vocación prepotente que como resultado comenzaron a atemorizar a la población y a asesinar gente".

"Aunque los Gobiernos no admitan el genocidio que cometieron, es genocidio", sostuvo el testigo ante Pedraz, al que explicó como la guerrilla "había quemado puentes, y había provocado derrumbes en carreteras".