GINEBRA, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
Una delegación de la ONU sobre Derechos Humanos ha instado este martes a las autoridades del país caribeño a investigar en profundidad los supuestos asesinatos y torturas cometidos por agentes de las fuerzas de seguridad, después de que dos informes hayan denunciado la muerte de nueve personas en el área metropolitana de Puerto Príncipe entre octubre de 2010 y junio de 2011.
Los informes, hechos públicos por el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y la Sección de Derechos Humanos de la misión de paz en Haití (MINUSTAH), recogen seis incidentes en los que se vieron implicados miembros de la Policía Nacional Haitiana. En ellos, murieron nueve personas.
Naciones Unidas vincula estas muertes con un posible uso excesivo de fuerza por parte de las fuerzas de seguridad, a las que se podría hacer responsables de ejecuciones arbitrarias o extrajudiciales. En uno de estos casos, un haitiano de 44 años identificado como Serge Démosthène fue golpeado por agentes de la Policía durante su detención en una de las principales comisarías de la capital.
La ONU ha denunciado que "muchos policías trabajan en condiciones muy peligrosas", pese a que la seguridad de la ciudadanía depende de forma sustancial de la Policía Nacional.
Según el documento hecho público este martes, "es urgente que el Gobierno adopte acciones para impedir los asesinatos, incluidas ejecuciones extrajudiciales, sumarias y arbitrarias, cometidos por representantes de la Policía Nacional Haitiana". Además, deben "asegurar investigaciones rápidas y efectivas" que deriven en una depuración de responsabilidades.
"Esta acción es esencial no sólo para asegurar la protección de los derechos a la vida y a la integridad física de los ciudadanos haitianos, sino también para reforzar la confianza pública en una institución esencial como la Policía Nacional Haitiana", ha añadido el texto.
PROCESOS SIN CASTIGO
Como parte positiva, la ONU ha destacado que el departamento de asuntos internos de la Policía haitiana ha abierto investigaciones para esclarecer algunos hechos de violencia que incluso han sido evaluados por una autoridad judicial.
Estas pesquisas se han traducido en varios casos en la suspensión o arresto de los agentes, así como en el comienzo de un proceso judicial, pero Naciones Unidas echa en falta condenas en el ámbito penal. De hecho, algunos agentes investigados han regresado al trabajo incluso antes de que concluyesen los procesos.
El informe también ha advertido de que, dentro de estos análisis de conducta, no se realizan de forma "sistemática" autopsias y análisis balísticos, mientras que "los testigos temen las consecuencias que pueda tener su testimonio", a lo que se suma que no consideran eficaz el sistema judicial y por lo tanto optan por no arriesgarse.