Actualizado 30/11/2009 19:18

Honduras.- Lobo aclara que su Gobierno no aceptará que "nadie meta sus narices" en los asuntos internos, incluido Chávez

Insiste en que el Congreso tendrá la última palabra sobre Zelaya y pide a la OEA "revisar su posición" sobre Honduras


BOGOTÁ, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente electo de Honduras Porfirio Lobo aclaró este lunes que su Gobierno no permitirá que "nadie meta sus narices" en los asuntos internos, incluido el mandatario venezolano, Hugo Chávez, y que no aceptará "imposiciones" de otros países.

"Nosotros somos un país libre, soberano e independiente y no aceptaremos imposiciones de nadie (...) que de alguna manera generen división en la familia hondureña", dijo Lobo en entrevista a la emisora colombiana La FM.

Así, Lobo ha dejado claro que no permitirá que "ni él (Chávez) ni nadie se atreva a meter las narices" porque Honduras lo que busca es "restablecer y normalizar nuestra relación con todos los países y lo que les pedimos es que nos respeten igual que respetamos nosotros".

"Estamos dispuestos a una relación muy cordial y no aceptaremos imposiciones de nadie", insistió Lobo que resultó electo este domingo por el opositor Partido Nacional como nuevo presidente de Honduras para el período 2010-2014.

Sobre el rechazo de parte de la comunidad internacional a los comicios por realizar en el marco de un Gobierno 'de facto', Lobo resaltó que su mandato está "en el marco de lo que es constitucional" porque fue electo en unos comicios convocados por "un tribunal electoral independiente" mucho antes del golpe de Estado del pasado 28 de junio.

Lobo ha calculado que la participación en estos comicios ha sido del 62 por ciento, "algo extraordinario comparado con el 2005 cuando llego al 54 por ciento", por lo que consideró que "aquí no han habido vencedores ni vencidos, aquí la democracia ha triunfado".

"El pueblo ha votado por el cambio", dijo al referirse a que a partir del año 2010 será el Partido Nacional, hasta la fecha en la oposición, el que llevará las riendas de ese país que atraviesa una de sus peores crisis políticas de los últimos 20 años.

"Dialogaremos con todos los sectores porque tenemos que apostar por la unión de la familia hondureña y no podemos detenernos en el pasado (...) lo más importante es ver el futuro y buscar la unión del pueblo hondureño", destacó.

RECONOCIMIENTO DE LA OEA

Sobre la postura asumida por la Organización de Estados Americanos (OEA) desde que en junio pasado se produjo el golpe de Estado, el presidente electo sugirió al organismo "revisar su posición" y aceptar los resultados de las elecciones de este domingo.

"Creo que la OEA tiene que revisar su posición y ver las democracias no únicamente sino como un tema de elección, sino como un tema de ejercer la democracia en el poder", expresó.

Para Lobo es fundamental que la OEA "vea que el proceso es nuestro, que el proceso es independientemente de la crisis de junio" en la que fue derrocado Manuel Zelaya para instaurar un Gobierno 'de facto' encabezado por Roberto Micheletti.

"No se por qué han mezclado la crisis del 28 de junio con un proceso electoral que es del pueblo hondureño, de los partidos políticos y de los candidatos independientes", lamentó.

Finalmente, Lobo dijo que será el Congreso el que decida el próximo 2 de diciembre sobre el futuro de Zelaya, quien desde el pasado mes de septiembre se encuentra refugiado en la Embajada de Brasil en Tegucigalpa.

Tanto Micheletti como Zelaya firmaron a finales de octubre el acuerdo de Tegucigalpa/San José en el que acordaron "someterse a lo que el Congreso decida" por tanto "tenemos que dejar" que sea el Parlamento el que "institucionalmente resuelva lo que ambos pusieron en sus manos".

Se espera que el próximo miércoles, 2 de diciembre, tome una decisión sobre la posibilidad de que Zelaya regrese a la presidencia para culminar su mandato el próximo 27 de enero cuando deberá traspasar el poder al presidente electo en los comicios del domingo.