Actualizado 30/11/2010 20:07

Honduras.- Lobo dice que los delitos imputados a Zelaya "no son para que vaya a la cárcel"

Descarta que su gobierno esté haciendo gestiones para retornar a la OEA


TEGUCIGALPA, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, aseguró que los delitos imputados al ex mandatario derrocado Manuel Zelaya no implican necesariamente pena de cárcel, al tiempo que sugirió la posibilidad de que se pudiese "defender en libertad" mientras se celebran los juicios en su contra, en caso de que quiera volver a Tegucigalpa.

Lobo descartó la posibilidad de ir a buscar a Zelaya a República Dominicana, donde se encuentra viviendo en calidad de 'huésped distinguido' desde que el pasado mes de enero asumiese el nuevo gobierno.

"Todos sabemos que el señor Zelaya, el ex presidente Zelaya, no regresa porque no quiere, porque esos juicios que tiene no son para que vaya a la cárcel", sino "para aquellos que se defienden en libertad", afirmó el mandatario este lunes en declaraciones a la prensa.

En reiteradas ocasiones, Lobo ha invitado a Zelaya a regresar a Honduras y hasta ha mencionado la posibilidad de otorgarle un indulto por los delitos que se le imputan --como corrupción y hechos contra la Constitución-- pero el ex presidente derrocado se ha negado a retornar alegando que no existen garantías para su defensa.

"Yo ofrecí ir a traerlo, pero lamentablemente él descartó la invitación, de manera que yo ya cumplí", subrayó Lobo. Sobre un eventual viaje a Santo Domingo, el mandatario aclaró: "No es cuando él quiera, es cuando yo quiera".

Zelaya fue derrocado por militares el 28 de junio de 2009, el mismo día que tenía previsto realizar una consulta popular para avanzar en la reforma de la Constitución. En su lugar, fue designado el entonces presidente del Congreso, Roberto Micheletti, quien instauró un gobierno 'de facto' rechazado por la mayor parte de la comunidad internacional.

REGRESO A LA OEA

Por otra parte, Lobo explicó que su Gobierno no está haciendo "ninguna gestión" para regresar a la Organización de Estados Americanos (OEA), organismo del que fue expulsado en julio de 2009, tras el golpe de Estado contra Zelaya.

"Para mí la OEA es un tema que algún día se va a dar; cuando se cansen algunos (países) de pelear con Honduras y ya creen que se puede, vamos a regresar", señaló el mandatario.

Desde que asumió el poder el pasado enero, Lobo ha intentado recuperar los vínculos con otras gobiernos que rompieron relaciones con Tegucigalpa tras denunciar que las elecciones presidenciales de noviembre de 2009 se realizaron en el marco de un Gobierno 'de facto'.

"Humildemente estamos esperando que algún día decidan" aceptar a Honduras en la OEA, confesó. "Pero no estamos haciendo ninguna gestión para querer impulsar o presionar, porque estamos dejándolo a la discreción de ellos", sostuvo Lobo.