Actualizado 30/12/2009 02:30

Honduras.- Zelaya pide a los líderes centroamericanos que no apoyen la "dictadura disfrazada" en Honduras


TEGUCIGALPA, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, lanzó este martes un llamamiento a los dirigentes centroamericanos para que no apoyen la investidura del mandatario electo, Porfirio Lobo, y trabajen para derrotar la "dictadura disfrazada", al tiempo que recordó el silencio de la comunidad internacional con el ascenso de Adolf Hitler al poder en Alemania.

En este sentido, Zelaya relató que cuando Hitler organizaba "el ejército más poderoso del mundo, muchos guardaron silencio y nadie reaccionaba con el brío y arresto necesario". Sin embargo, llevó a cabo invasiones y sus acciones costaron "más de 60 millones de vidas humanas, y el holocausto de seis millones de judíos".

"Debemos actuar con diligencia para que la historia brutal de guerras, de violencia con fusiles, golpes de Estado con secuelas de muertes y sangre que creímos superada en Centro América, no regrese", reclamó, en un comunicado en el que volvió a criticar al Gobierno 'de facto' constituido tras el golpe de Estado del 28 de junio y los comicios de finales de noviembre en los que salió elegido Lobo.

Zelaya destacó que Centroamérica sufre "la mayor crisis política desde las guerras civiles de los ochenta" y denunció el "salvajismo y el terror" en que se ha transformado la situación social y política hondureña. Así, aludió a más de 4.200 personas sospechosas de violaciones de los Derechos Humanos, 130 asesinatos de miembros de la resistencia, cinco jóvenes abatidos por militares en manifestaciones pacíficas, más de 3.000 detenciones "ilegales", 14 medios de comunicación "amenazados" y 114 presos políticos.

El mandatario derrocado, que permanece refugiado en la Embajada de Brasil en Tegucigalpa, considera que los países de Centroamérica deben unirse como "pueblos hermanos" para "recuperar la democracia en Honduras". "Hay que actuar ¡ahora! con firmeza, en nuestras manos los pueblos han confiado su destino frente al abuso, después será demasiado tarde para lamentarnos", reclamó.

En su opinión, el freno a los "actos criminales" representa una "obligación moral para todo centroamericano". "No podemos guardar silencio o permitir que por la impunidad promovida por intereses particulares, estos actos de violencia se repitan en alguno de nuestros países".

"Estoy totalmente seguro de que mientras no cambien las condiciones actuales, ustedes no querrán comprometer su investidura apoyando una dictadura disfrazada", explicó.