LIMA, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Perú, Ollanta Humala, ha indicado este martes que el nuevo Gobierno, que ayer inició su andadura, intentará fortalecer el diálogo con la población para solucionar los conflictos sociales que afronta el país andino.
"Como ya ha dicho el primer ministro, Juan Jiménez, vamos a darle más fuerza al diálogo", ha reiterado el mandatario, al tiempo que ha subrayado que "hay que respetar el principio de la autoridad (del Gobierno)".
Humala ha realizado estas declaraciones desde la ciudad de Arequipa, ubicada en la provincia homónima, en el sur del país, donde ha inaugurado una planta potabilizadora. "Ahora podemos decir que hay un proyecto serio y creíble para solucionar el problema del suministro de agua en la región", ha sostenido.
Además, ha destacado que "el agua es el mejor instrumento para la inclusión social", ya que "favorece la estabilidad y, por tanto, las inversiones". "Hoy se coloca agua y mañana serán pistas y veredas", ha augurado, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias ANDINA.
Las palabras de Humala se enmarcan en el conflicto que vive el departamento de Cajamarca desde el pasado 4 de julio, cuando comenzaron los enfrentamientos entre los detractores del proyecto minero Conga y las fuerzas de seguridad, que se saldaron con cinco muertos, entre ellos un joven de 17 años de edad, y decenas de heridos.
La población cajamarquina se opone al proyecto minero, impulsado por la empresa estadounidense Newmont y valorado en 4.800 millones de dólares (3.975 millones de euros), porque, según argumenta, detraerá los recursos hídricos de la región. El Gobierno, por su parte, insiste en que el suministro de agua está garantizado.
Hace una semana, representantes de las comunidades de Cajamarca y de la Iglesia Católica se sentaron a dialogar para solucionar el conflicto, pero ha sido imposible porque la población local ha reiterado su oposición al proyecto minero y el Gobierno se ha negado a dar marcha atrás en su decisión de llevarlo a cabo.
El conflicto ha alcanzado tal magnitud que ayer Humala se vio obligado a remodelar su Gobierno, dejando en el cargo a 13 ministros, entre ellos los fundamentales para el desarrollo económico del país, y renovando a seis, incluido el primer ministro, cargo para el que ha nombrado a Juan Jiménez, experto en Derechos Humanos, en sustitución de Óscar Valdés, ex militar.